Imagen ilustrativa. A la fecha en Guatemala se contabilizan 11,132 casos de niños de 0 a 9 años, mientras que en el rango de 10 a 19, la cifra asciende a 29,345. Foto: UNICEF.

En Florida, Estados Unidos, cada vez más niños sanos se enferman de Covid-19, un aumento que en parte ha sido atribuido a la variante Delta considerada altamente contagiosa. En Guatemala, desde marzo de 2020 al 8 de agosto del presente año, el Tablero de Situación del coronavirus contabiliza 11,132 casos de niños de 0 a 9 años, mientras que en el rango de 10 a 19, la cifra asciende a 29,345.

La variante Delta fue identificada en Guatemala en pacientes jóvenes y por eso resulta importante considerar, ante el avance de esta cepa en la región, que los pediatras juegan un papel vital en el cuidado de niños y adolescentes después de que se han infectado con Covid-19.

La Academia de Pediatras de Estados Unidos (AAP, por sus siglas en inglés), subraya la necesidad de que un pediatra pueda dar seguimiento a síntomas respiratorios post Covid-19, para prevenir o identificar riesgos de problemas cardíacos, aturdimiento o fatiga cognitiva, así como el cuidado de la salud mental.



 

FLORIDA UNA MUESTRA DEL AUMENTO DE CASOS

Un artículo publicado por el medio Newsweek resalta que cada vez más los niños sanos en Florida se enferman con coronavirus y datos compartidos por el Departamento de Salud y Servicios Humanos de EE. UU., demuestran que ese estado tiene la mayor cantidad de menores hospitalizados, ya que hasta 172 están siendo tratados en instalaciones médicas.

Imagen ilustrativa. En algunos países como El Salvador se ha iniciado el proceso de vacunación contra el COVID-19 en menores de edad. Foto: La Hora/Archivo.

Es decir, un aumento de 143 niños hospitalizados por el virus en Florida en comparación a los datos de finales de la semana pasada.

La doctora Aileen Marty, experta en enfermedades infecciosas de la Universidad Internacional de Florida, explicó a la cadena de noticias CNN el viernes por la noche que las instalaciones hospitalarias están luchando para hacer frente al incremento de casos.

«El número de casos en nuestros hospitales, en niños y nuestros hospitales de niños está completamente abrumado», mencionó Marty.

Mientras que el doctor Kenneth Alexander, jefe de la División de Enfermedades Infecciosas del Nemours Children’s Hospital en Orlando Florida, explicó a Newsweek, que el paciente más joven del hospital y que estaba con ventilador, no tenía factores de riesgo particulares.

Alexander destacó que, a diferencia de los primeros meses de la pandemia, cuando el virus no parecía afectar mucho a los niños, “ahora los está enfermando».

En Guatemala, las cifras por otro lado ofrecen un contraste, pues en el rango de 0 a 19 años, que incluye a niños, niñas y adolescentes, así como jóvenes, en total se han registrado 40,477.




PEDIATRAS JUEGAN UN PAPEL VITAL POST COVID-19

Bajo esa realidad, la AAP ofrece orientación sobre el cuidado de niños después de padecer el Covid-19 o bien una guía con recomendaciones para menores de edad con coronavirus prolongado y otros síntomas que podrían padecer después de la infección.

Lo más importante es el seguimiento por medio de atención médica pediátrica, para monitorear la resolución de los síntomas de Covid-19, así como administrar la vacuna y otros inmunizadores de rutina, detectar y abordar problemas de salud mental, así como coordinar la atención con especialistas, según corresponda.

«Los pediatras juegan un papel vital en el cuidado de niños y adolescentes después de que se han infectado con Covid-19», dijo la doctora Sarah Risen, neuróloga pediátrica del Texas Children’s Hospital y autora de la guía.

Imagen ilustrativa. Pediatras de instituciones públicas y privadas informaron sobre la situación actual de los casos de COVID-19 en menores. Foto: UNICEF

VISITAS DE SEGUIMIENTO

Por eso destaca que, una visita de seguimiento permite a los médicos evaluar si existen síntomas persistentes o nuevos, así como complicaciones ocasionadas por el Covid-19; con los pediatras también pueden abordar el aspecto de la vacunación, la cual aún no se ha generalizado a todos los países.

“Es importante destacar que los pediatras pueden verificar la salud mental y los problemas cognitivos / de aprendizaje y recomendar los apoyos adecuados para que los niños regresen a la vida diaria de la manera más fluida posible”, afirmó Risen.

La AAP recomienda que todos los niños y adolescentes que den positivo en la prueba del Covid-19, tengan al menos una conversación de seguimiento o una visita a su hogar de un médico de atención primaria.

También es importante considerar que las visitas de seguimiento deben realizarse después del período de cuarentena recomendado y antes de que el niño vuelva a la actividad física.

La APP recalca que los pediatras pueden asesorar a las familias sobre el regreso a la guardería, los deportes de equipo y la escuela, además, deben estar atentos a problemas físicos y mentales nuevos o residuales.

La guía señala una condición posterior al Covid-19, denominada «COVID de larga duración» un término que abarca las consecuencias para la salud física y mental cuatro o más semanas después de superada la infección.




¿QUÉ DEBEN TOMAR NOTA LOS PEDIATRAS SEGÚN LA GUÍA DE LA AAP?

Sobre esto, es importante que los pediatras tomen nota de los problemas en curso o residuales de aspectos respiratorios, considerando que los pulmones son el órgano más afectado tras la infección o aquellos que incluyan dolor de pecho, tos y dificultad para respirar inducida por el ejercicio.

Así como aspectos cardíacos, considerando los riesgos incluyendo la miocarditis, que puede ocasionar dolor de pecho, dificultad para respirar, arritmias y fatiga.

También recomiendan prestar atención a problemas como aturdimiento o fatiga cognitiva: la “niebla mental” (un término genérico que se refiere al pensamiento confuso, falta de atención, dificultad de concentración o memoria) una queja neurológica frecuente en adultos después del Covid-19.

Sin embargo, los niños en edad escolar y los adolescentes pueden tener quejas similares.

Foto ilustrativa. En estos momentos, para niños y adultos, cobra mayor importancia las medidas que permitan evitar los contagios de Covid-19. En la imagen, una niña acompaña a un adulto sobre la Sexta Avenida de la zona 1, utilizando mascarilla. Foto La Hora/José Orozco
Artículo anteriorLos CDC piden a embarazadas vacunarse contra el COVID-19
Artículo siguienteSe dispara el contagio, ¿quién tiene la culpa?