La Diócesis Católica Romana de Albany, Nueva York, encubrió abusos sexuales cometidos por sacerdotes durante décadas y protegió a clérigos enviándoles a un tratamiento privado en lugar de llamar a la policía, reveló el obispo que por mucho tiempo estuvo al frente de la diócesis.
El obispo Howard Hubbard, que dirigió la diócesis en el distrito de la capital del estado de 1977 a 2014 y él mismo ha sido acusado de abuso sexual, hizo la confesión a través de su abogado al Albany Times-Union en respuesta a preguntas del periódico.
El Times Union reportó la declaración de Hubbard este sábado.
«Cuando una acusación de mala conducta sexual cometida por un sacerdote era recibida en las décadas de 1970 y 1980, la práctica común en la diócesis de Albany y en otras partes era retirar temporalmente al clérigo del ejercicio de su ministerio y enviarle a terapia y tratamiento», dijo Hubard, de 82 años.
«Solamente cuando un sicólogo o siquiatra con licencia determinaba que el sacerdote era capaz de regresar al ministerio sin reincidir era cuando nosotros considerábamos reinstalar al padre en el ministerio», sostuvo. «El consejo profesional que recibimos era bienintencionado, pero erróneo y lamento profundamente que lo hayamos seguido».
Cerca de 300 demandas legales han sido presentadas contra la diócesis de Albany bajo una ley estatal que le da a la población hasta el 14 de agosto para demandar por abusos sexuales que aseguran haber sufrido siendo niños, en algunos casos hace décadas.
Anteriormente, Hubbard ha negado las acusaciones de que abusó sexualmente de menores. En una declaración en agosto de 2019, dijo que «nunca he abusado sexualmente de nadie en mi vida. Confío en los procesos canónico y legal y creo que mi nombre será exonerado a su debido tiempo».
En respuesta a las acusaciones en las demandas legales de que él ignoró, desestimó o encubrió los abusos cometidos por otros, Hubbard dijo al Times Union en su comunicado que él era un líder en las gestiones de la Iglesia contra los abusos, incluyendo el respaldo a las revisiones de antecedentes y la compensación para las víctimas.
El comunicado de Hubbard no fue autorizado por la diócesis, publicó el periódico.