La mayoría de los republicanos quieren que el expresidente Donald Trump tenga al menos algo de influencia al determinar el rumbo del partido, pero muchos de sus seguidores dicen estar inquietos por el futuro.
Una nueva encuesta de The Associated Press-NORC Center for Public Affairs Research refleja el malestar generalizado de los republicanos sobre el rumbo del país, el estado de la democracia estadounidense y el presidente Joe Biden en particular. Apenas el 15% aprueba su gestión y el 66% insiste en que la elección fue ilegítima, una mentira perpetuada por Trump que pone de manifiesto su arrastre sobre los votantes republicanos.
Las preocupaciones republicanas se extienden a su propio partido. Apenas el 41% se declara optimista con respecto al futuro. El 13% se declara “muy” optimista. Y un 33% expresa pesimismo.
La dirigencia republicana espera recuperar el control del Congreso en las elecciones legislativas del año próximo. Pero la falta de optimismo podría ser una señal anticipada de la falta de entusiasmo de los republicanos por acudir a las urnas, sobre todo ante la ausencia de Trump en las boletas.
Sin embargo, la historia demuestra que el partido del presidente casi siempre pierde bancas en las elecciones de la mitad del mandato.
Los dirigentes republicanos han dedicado buena parte del año a tratar de despertar las iras de los votantes en asuntos como la inflación, la inmigración y con toda clase de teorías conspirativas.
La encuesta revela que Trump sigue siendo una figura imponente en el partido. La mayoría de los expresidentes abandonan el centro de la escena cuando dejan el cargo. Trump, en cambio, sigue reafirmando su poder, realiza actos, respalda candidatos e insinúa que se presentará en 2024.
El 60% del público en general tiene una visión desfavorable de Trump, pero el 76% de los republicanos lo ven favorablemente. El 47% dice que debería ejercer “mucha” influencia sobre el futuro del partido, el 34% dice que debería ejercer “un poco” de influencia, pero solo el 18% dice que su influencia debería ser nula.
En cuanto a la elección de 2020, la encuesta revela que el 62% de los republicanos considera “extremadamente” o “muy” importante seguir investigándola a pesar de que no hay pruebas de fraude generalizado, una acusación rechazada por jueces, autoridades electorales de los estados y el propio secretario de Justicia de Trump.
En cambio, solo el 38% dice que es “extremadamente” o “muy” importante investigar los sucesos del 6 de enero, cuando seguidores de Trump tomaron por asalto el Capitolio para tratar de impedir la transición del poder.