Para el técnico del Manchester United Ole Gunnar Solskjaer, ganar la Liga Europa significaría más que evitar otra campaña sin trofeos. El noruego espera que la final de hoy sea el comienzo de algo grande.
Contra un equipo de Villarreal y su técnico especialista en la Liga Europa Unai Emery, el equipo de Solskjaer busca evitarse una cuarta temporada consecutiva sin centros. Esa sería la racha más larga para United desde la década de 1980, en los tiempos iniciales del reinado de Alex Ferguson, que aparte de eso estuvo cargado de trofeos.
Solskjaer admitió que United probablemente estará sin su capitán y zaguero central Harry Maguire, que viajó a Polonia para el partido, pero no entrenó el martes debido a una lesión en su tobillo. El delantero Anhony Martial no se ha recuperado de la lesión en la rodilla que le ha mantenido fuera de acción en los últimos dos meses.
La final marcará 22 años desde que Solskjaer anotó el gol decisivo por United para vencer a Bayern Múnich en la final de la Liga de Campeones de 1999. Fue una de las remontadas más épicas del fútbol, con ambos goles de United anotados en el alargue. Ferguson era el técnico de United esa noche y viajó ahora con el equipo a Polonia para la final de hoy.
United no ha ganado un trofeo de ningún tipo desde que el equipo de José Mourinho venció cómodamente a Ajax 2-0 en la final de la Liga Europa del 2017. Con Solskjaer a las riendas, el equipo llego a semifinales el año pasado, antes de ceder una ventaja de 1-0 y caer 2-1 ante el campeón eventual Sevilla.
Tres viajas a las etapas finales de la Liga Europa en cinco temporadas contarían como un éxito para muchos clubes, pero para United son un recordatorio de que el club no ha peleado por el trofeo mayor en la Liga de Campeones.
Esta temporada, United terminó en la Liga Europa tras caer 3-2 ante Leipzig en el último partido de la fase de grupos de la Liga de Campeones. El equipo de Solskjaer rescató la campaña con un segundo lugar en la Premier inglesa, el mejor cierre para United desde el 2018. Para ellos, hoy será idealmente el último para el equipo en la Liga Europa por un bien tiempo.
Estar en la final es un hito para Villarreal, que nunca antes ha jugado por un trofeo europeo importante. El técnico Emery llega a su quinta final en la competencia, luego de tres triunfos consecutivos con Sevilla entre el 2014 y el 2016 y un segundo puesto con Arsenal en el 2019. Emery perdió su puesto con Arsenal en noviembre de ese año y llegó a Villarreal en julio del 2020.
Una victoria de Villarreal deleitaría a los hinchas españoles en el partido en Polonia — cada equipo recibió 2.000 boletos. El encuentro será jugado con una concurrencia reducida de 9.500 — 25% de la capacidad del estadio, debido a la pandemia.
Un triunfo para el equipo de Emery además pediría una barrida inglesa de las máximas competencias europeas, con Chelsea y Manchester City en la final de la Liga de Campeones en Oporto el sábado. Villarreal es el único finalista que no fue parte del fallido intento por crear una Super Liga europea esta temporada.
