Por HYUNG-JIN KIM
SEÚL, Corea del Sur
Agencia AP
Cientos de miles de estudiantes con mascarilla, incluyendo 41 que dieron positivo al coronavirus, tomaban hoy la altamente competitiva prueba de acceso a la universidad en Corea del Sur, a pesar del repunte de los contagios que obligó a las autoridades a endurecer las medidas de distanciamiento social.
Alrededor de 426.340 estudiantes realizaban la prueba, que se celebra en un único día y en unos 1.380 centros en todo el país, incluyendo hospitales y otras instalaciones médicas donde los 41 pacientes y cientos de alumnos en cuarentena se sentaron separados de los demás, explicó el Ministerio de Educación.
El examen anual, llamado «suneung» o Prueba de Habilidad Escolar Universitaria, es crucial para muchos estudiantes en un país obsesionado con la educación, donde las perspectivas laborales, el estatus social e incluso la pareja dependen a menudo de la universidad donde se gradúan.
Los ministerios de Defensa y Tierra dijeron temporalmente las maniobras militares y pararon el tráfico aéreo para reducir el ruido durante las partes de escucha de la prueba de inglés, como en años anteriores. Oficinas gubernamentales y muchas empresas privadas pidieron a sus trabajadores que llegasen a la oficina más tarde, y la bolsa demoró el inicio de la sesión para dejar las calles despejadas para los estudiantes.
La prueba de este año estaba programada para noviembre, pero se demoró por la pandemia. Los expertos dicen que las clases presenciales y online han aumentado la brecha entre los estudiantes de alto y bajo rendimiento por la menor interacción con los maestros, las distracciones digitales y las dificultades técnicas.
«Si la prueba se hubiese retrasado de nuevo, nuestros hijos habrían sentido mucha más presión psicológica… Creo que es una suerte que la prueba se esté celebrando ahora», dijo Kim Sun-wha, madre de uno de los alumnos. «Espero que todos eviten cometer errores, lo hagan lo mejor posible y obtengan buenos resultados».
Las madres abrazaron a sus hijos y le dieron palmadas en la espalda antes de su entrada a un centro temporal de exámenes habilitado en una escuela de secundaria en Seúl. Una gritó «¡No te pongas nervioso! ¡Hazlo bien!» y otra dijo «¡Ánimo!».
Los estudiantes pasaron controles de temperatura para acceder a la prueba, deben llevar mascarilla durante todo el examen y tienen que mantener la distancia de seguridad con los demás. Además, deben llevar su propia agua y el almuerzo ya que no pueden utilizar los purificadores de agua ni las fuentes y no pueden salir a comer. Los que tengan fiebre pasarán a zonas aisladas.
En los últimos días, el gobierno surcoreano pidió a la población que se quedase en casa y evitase las reuniones en lo posible para garantizar un entorno seguro para quienes se examinan. Park Yu-mi, un funcionario en Seúl, explicó que las autoridades solicitaron a las empresas que permitan que al menos un tercio de sus empleados trabajen desde casa.
Preocupa que la prueba de acceso a la universidad pueda acelerar la propagación del virus en la nación.
Corea del Sur reportó el jueves 540 nuevos casos que elevaron el total nacional desde el inicio de la pandemia a 35.703, con 529 fallecidos.