Por Denis Aguilar
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En el reporte de la actividad económica de junio de 2020, la Fundación Libertad y Desarrollo señala que la economía guatemalteca ya está en una etapa de recesión debido a varios indicadores que se ha venido a la baja a causa de la crisis del COVID-19.
La Fundación explica que la economía de Guatemala se encuentra en la recesión más fuerte en décadas, lo cual se atribuye a la caída del Índice Mensual de la Actividad Económica (IMAE), a la baja en recaudación tributaria y los más de 100 mil trabajadores suspendidos.
Asimismo, la Fundación señaló que el IMAE cayó 5.2% en marzo y 10.2% en abril, lo que se trata de “la mayor contracción de los últimos 38 años”.
“Técnicamente se dice que una economía está en recesión cuando se registran dos trimestres consecutivos de caída del PIB; sin embargo, debido a la histórica caída del IMAE y de la recaudación fiscal, y a los más de 100 mil trabajadores actualmente suspendidos (sin contar los despedidos, dado que no se tienen estadísticas al respecto) se puede decir que la economía guatemalteca se encuentra ya en una recesión”, dijeron en su informe.
El reporte señala que en mayo se dio una caída del -13.3% en el IVA doméstico, mientras que el IVA a importaciones tuvo una caída del -30%, lo cual se refleja en un menor consumo de combustibles.
También mencionan que la importación de vehículos de desplomó -50% en abril y -52.6% en mayo, siendo estas las caídas más fuertes desde enero del 2005, ni siquiera en la crisis del 2009 se había dado esta situación, explican.
EJECUCIÓN PRECARIA
Sobre los Q20 mil 045.7 millones que el Congreso de la República aprobó en ampliaciones presupuestarias para enfrentar la crisis del COVID-19 y ejecutar programas, la Fundación señala que “la ejecución hasta el 31 de mayo ha sido bastante precaria”.
“Los ministerios que menos han ejecutado hasta esa fecha son el de Economía (7.8%), Desarrollo Social (11.2%) y Agricultura (15.2%)”, indicaron.
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Entre los años 2013 y 2019, en promedio se había ejecutado un 34.4% hasta el mes de mayo, mientras que la ejecución actual del presupuesto asciende a 30% al 31 de mayo del 2020.
“La poca ejecución del gasto público se entiende por ser un gobierno nuevo, con funcionarios que no tienen mucha experiencia en el sector público; y también porque están ejecutando un presupuesto que estaba vigente para 2019, que no se actualizó a los requerimientos del 2020 y que han tenido variaciones importantes sobre la marcha”, explicaron.
No obstante, señalaron que una baja ejecución también tiene un efecto sobre la economía, ya que con una caída en el consumo y en la inversión privada, una baja ejecución del gasto público agudiza la crisis.
En cuanto a la estimación de la contracción económica hecha por el Banco de Guatemala (Banguat), señalan que esta es mucho más realista, aunque señalaron que como Fundación Libertad y Desarrollo, estiman que la economía caerá entre el -3% y -5%, debido al avance que el virus está teniendo.