Mariela Castañón
mcastanon@lahora.com.gt
En las últimas semanas, por medio de diferentes canales de comunicación, he conocido que más agentes de la Policía Nacional Civil (PNC) han resultado afectados de coronavirus COVID-19 y otros están en cuarentena esperando los resultados. La situación es preocupante porque en este momento los hospitales temporales empiezan a colapsar y brindar atención médica integral es un desafío en nuestro país.
La última estadística proporcionada por las autoridades de la PNC, fue el 23 de abril, cuando oficializaron tres casos de policías afectados por este virus, posteriormente se indicó que toda la información se manejaría por medio de la Presidencia, que aunque cada noche da a conocer los nuevos casos, se limita a brindar detalles generales.
Mientras tanto, persiste la angustia de policías en cuarentena, quienes temen ser afectados por esta enfermedad, ante la ausencia de condiciones para atenderlos integralmente.
Otros policías, testigos y compañeros de trabajo del personal que ha resultado afectado, han manifestado preocupación por sus compañeros, que han denunciado que luego de ser trasladados a hospitales no tienen espacios donde descansar, sino que los están dejando en el suelo, tampoco tienen condiciones adecuadas, ni atención integral.
El 23 de abril, día en que se oficializaron los casos, las autoridades policiales explicaron que las tres personas afectadas fueron trasladadas al Hospital Temporal del Parque de la Industria, mientras que los casos recientes, según las fuentes policiales, han sido trasladados a las instalaciones del Instituto Guatemalteco de Seguridad Social (IGSS).
Ayer, en una citación en el Congreso, la gerente del IGSS, Ana Ortiz, dijo que atendían a 66 agentes policiales asintomáticos.
Hace pocos días autoridades policiales, explicaron que trabajan en la implementación de un hospital temporal ubicado en el Club de Oficiales de la zona 6, para el personal afectado por coronavirus. El lugar tendrá capacidad para más de 50 pacientes, sin embargo, la adecuación todavía está en proceso.
El incremento de casos de coronavirus en Guatemala representa una situación compleja porque empieza a evidenciarse el colapso en los hospitales temporales y la situación que denunció el personal médico recientemente es grave.
Lamento mucho la situación de estos servidores públicos, que también son ciudadanos y que se enfermaron por resguardar un cordón sanitario, por el contacto con sus compañeros que resultaron positivo, en diferentes diligencias u otras situaciones relacionadas con su trabajo.
Desde este espacio personal, quiero hacer un llamado a las autoridades de la PNC, del Ministerio de Gobernación y a las entidades de Gobierno en general, para duplicar esfuerzos y buscar la forma de atender integralmente a toda la población enferma, que cada centavo sea invertido adecuadamente, se evite corrupción y se busquen mecanismos para salir realmente adelante.
Los ciudadanos también tenemos responsabilidades como cuidarnos y aplicar las medidas necesarias: usar mascarilla al salir de nuestras casas, lavarnos las manos constantemente y continuar con el distanciamiento social.