Personas con mascarillas frente a una iglesia católica durante la cuarta semana de un toque de queda, el miércoles 22 de abril de 2020. Foto La Hora/ Moises Castillo/AP

Por Alfonso Mata
alfmata@hotmail.com

La cuarentena es un modelo infecto-lógico; la salida de la cuarentena tiene que pensarse bajo un aspecto epidemiológico. Eso parte y se inicia con entender y conceptualizar una lógica de estrategia de poblaciones, lo que significa pensar no solamente en base a si están o no están infectados, si son o no asintomáticos sino también de vulnerabilidad y riesgo en infectados y no infectados (para poder realizar esa clasificación urgen las pruebas virales). Esto va seguido de otra acción fundamental: hacer monitoreo de esos subtipos, y de ello atender a los grupos vulnerables y en riesgo y para esto, hay que actuar con lógica de focos, estudiando y aislando los focos que se encuentren, los brotes y montar sitios Centinelas de seguimiento de la epidemia de esta al darse. Sobre la implementación y organización de estos modelos, ya existe experiencia nacional como en países europeos.

No se pueden establecer modelos de salida de la cuarentena acotados a expertaje profesional médico porque lo que demuestra este epidemia es una complejidad social muy alta, dentro de la cual cayó el virus generando diferentes impactos no solamente en la salud del individuo sino en una colectividad Y ante ese impacto tan heterogéneo tenemos que sumar saberes para poder atender de la forma más adecuada y exitosa las necesidades de esos sectores sociales Eso significa que el nuevo modelo de salida de la cuarentena no puede ser manejado solamente por infectológos o por salubristas Hay que sumar economistas, comerciantes productores, sector informal. Es decir atender todas las aristas de la complejidad de la pandemia.

Las estadísticas manejadas hasta la fecha, no deben ser, ni generar, una manifestación de miedo o temor sino de calma y enfocarnos a tratar de correlacionar las necesidades de los estratos socioeconómicos con más necesidades con un enfoque de vulnerabilidad y riesgo claro. Ante la heterogeneidad del problema, creo que la apertura de la cuarentena debe ser liderada y comandada por un grupo multidisciplinario. No es la voz de un presidente la que va a solucionar toda la problemática social económica y salubrista que se nos viene, tiene que ser un grupo que sepa explique y se comunique con la sociedad a través de los medios de comunicación de forma integral porque el problema va a ser global y necesita soluciones globales

Estamos hablando Pues que probablemente se debe usar estrategias de levantamiento de cuarentena segmentada. Quién sabe los barrios más pobres probablemente necesita mucho más rápidamente la levantada de una cuarentena dado que su red social su interacción social en esos barrios en aldeas en caseríos funciona a través de una interacción social mucho más fuerte que las los barrios metropolitanos de nivel medio o alto y el acercamiento a ellos de recursos al igual que a trabajo resulta fundamental, es un reto para el gobierno, cómo la institucionalidad pública tan débil, va a atender el aumento de demandas socioeconómicas de esas poblaciones pobres que se van a incrementar.

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