Emilio Matta Saravia
emiliomattasaravia@gmail.com

En distintas encuestas los guatemaltecos han expresado que su mayor preocupación es la difícil situación económica en la que se encuentra el país, que no consiguen empleo y que lo que ganan no les alcanza para sobrevivir.

Ciertamente el país atraviesa una difícil situación en el plano económico, donde el sector que consistentemente, año con año, la dinamiza son los migrantes con los ya más de 9 mil millones de dólares en remesas que envían desde los Estados Unidos. Una parte importante del crecimiento de la economía guatemalteca se debe a este aporte. Y es muy elocuente el titular de La Hora del sábado 23 de marzo, el cual hace alusión a que los migrantes envían el 12% del PIB, pero tan solo el 2.3% de ellos emitirá su voto en estos comicios. Lamentable.

Prácticamente la totalidad de los candidatos de los partidos políticos que participan en estas elecciones para Presidente y Vicepresidente de la República no han logrado aún entregar programas serios de gobierno a la población guatemalteca, que es a quienes realmente se deben, donde indiquen de forma detallada cómo abordarán los distintos problemas que aquejan a la población. En algunos casos, los candidatos denotan una total ignorancia en temas económicos y sociales. Y es complejo abordarlos, ya que no se puede trabajar solamente en el tema económico, por ejemplo, sin atacar males enraizados en nuestra sociedad como la corrupción, o problemas estructurales como la desnutrición crónica, la salud y la educación. Para caminar en la dirección correcta se deben abordar de forma integral los motivos torales de por qué tenemos un país donde nuestra población vive en condiciones tan precarias y de qué forma puede el Estado crear las condiciones para empezar a cambiar esta situación.

En algunos foros en los que he participado, intelectuales y empresarios dicen que el principal problema económico de Guatemala es la falta de inversión, y que, creando las condiciones necesarias para atraer inversión (siendo estas certeza jurídica, incentivos fiscales y mejorar la infraestructura), el país podrá tener el tan ansiado despegue económico. Creo que es una visión incompleta de las medidas que se deben tomar para revertir la situación en la que nos encontramos. Incompleta, porque en temas de fondo como la desnutrición crónica infantil, que es un tema toral a resolver si de verdad queremos tener una población que pueda desarrollarse y ser productiva en su edad adulta, la mayoría de las propuestas se centran en que con que la población tenga empleo el problema se soluciona. Eso es falso y evidencia la ignorancia que tienen en el tema, ya que el impacto que la desnutrición crónica infantil tiene en la atracción de inversión extranjera en un país es muy elevado.

Inversionistas serios no vendrán a Guatemala a arriesgar su capital cuando tendrán serias dificultades para encontrar personas con una mínima preparación intelectual y académica para laborar productivamente en sus empresas.

Si los candidatos y sus equipos, si es que los tienen, desconocen un tema tan sencillo y evidente, ¿realmente están preparados para gobernarnos?

Emilio Matta

emiliomattasaravia@gmail.com

Esposo y padre. Licenciado en Administración de Empresas de la Universidad Francisco Marroquín, MBA de la Universidad Adolfo Ibáñez de Chile, Certificado en Métodos de Pronósticos por Florida International University. 24 años de trayectoria profesional en las áreas de Operaciones, Logística y Finanzas en empresas industriales, comerciales y de servicios, empresario y columnista en La Hora.

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