Por ROB HARRIS
LONDRES
Agencia (AP)
Dele Alli anotó un tanto, poco antes de ser impactado en la cabeza por una botella, y Tottenham se impuso ayer 2-0 al Arsenal en el derbi del norte de Londres para avanzar a las semifinales de la Copa de la Liga.
La botella de plástico fue lanzada desde la tribuna del Emirates Stadium unos 12 minutos después de que Alli había marcado el segundo gol de los Spurs, que no se imponían en cancha de los Gunners desde 2010.
“Esto hizo más dulce el gol y la victoria”, comentó Alli, quien respondió a la agresión mostrando dos dedos a los hinchas del Arsenal, para hacer referencia a la ventaja del Tottenham en el encuentro de cuartos de final.
Varios policías se colocaron en el graderío para ampliar la barrera de seguridad entre los seguidores del Tottenham y los del Arsenal.
El hincha que arrojó la botella podría ser vetado de los estadios si se le identifica mediante los videos de seguridad.
Tottenham, que eliminó a West Ham en la ronda anterior, deberá encarar otro duelo contra un equipo londinense. En enero, disputará un enfrentamiento a ida y vuelta con Chelsea, que superó en la jornada 1-0 a Bournemouth con una diana de Eden Hazard a los 84 minutos.
El campeón defensor Manchester City y el Burton de la tercera división completan el grupo de semifinalistas.
Con audacia y talento, Alli elevó un balón ante la salida del arquero Petr Cech a los 59 minutos. En el primer tiempo, había participado en la jugada que derivó en el tanto del surcoreano Son Heung-Min.
La falta de un título es la única mancha durante la gestión de Pochettino que comenzó en 2014. Pero el avance que ha logrado con un plantel austero en comparación con otros grandes de la Liga Premier ha derivado en que se le mencione como un candidato para sustituir a José Mourinho en el banco del Manchester United.
En los dos goles del Tottenham participó un compatriota de Pochettino, nada menos que el arquero Paulo Gazzaniga, quien realizó largos despejes.
