POR MARIELA CASTAÑÓN
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Hace un año, las autoridades se comprometieron a dignificar al personal de la Policía Nacional Civil (PNC) discapacitado, a través del reclutamiento en puestos administrativos, la entrega de sillas de ruedas y facilitación de terapias médicas, sin embargo, las promesas se incumplieron.
La Hora entrevistó a varias personas que sufren discapacidad y explicaron que siguen en la misma circunstancia, pues están desempleados, con problemas económicos y dificultades para obtener los medicamentos en el Hospital de la PNC.
De acuerdo con la Oficina de Valor y Servicio de la institución policial, existen alrededor de 450 policías discapacitados, quienes padecen paraplejia, perdieron algún miembro de su cuerpo o son invidentes.
En tanto, el 10 de diciembre de 2013, el director de la PNC, Telémaco Pérez y la Comisionada para la Reforma Policial, Adela de Torrebiarte, se comprometieron a no abandonar a estas personas, pero la promesa prácticamente no avanzó.
“Uno de los ejes fundamentales de la Policía y del Ministerio de Gobernación (Mingob), es la dignificación. Ellos –los discapacitados– no van a ser abandonados, van a seguir siendo parte de nuestra policía, fueron parte del trabajo policial y del servicio que dieron a la comunidad y continuarán siendo apoyados, es un compromiso”, dijo Pérez en aquella ocasión.
Esta mañana se buscó una declaración del Director y admitió que no se ha logrado incorporar a los policías en áreas administrativas.
“No se ha logrado incorporar a personal discapacitado en puestos administrativos, está en proyecto, pero no se ha realizado, hay algunos, pero son mínimos, pero la verdad ese proyecto no se ha ejecutado”, indicó Pérez.
Aunque se intentó obtener una declaración de la Comisionada, no fue posible, pues mediante un mensaje de texto, dijo que se encontraba fuera del país, la intención era consultarle sobre si los policías podrían ser ubicados en la línea 110, pues recientemente el Centro de Investigaciones Económicas Nacionales (CIEN), dio a conocer que al menos 30 personas que no eran policías atendían denuncias y eran contratadas por la Reforma Policial.
SIN ATENCIÓN
Miguel Castillo, exoficial de la PNC, quien sufrió paraplejia en 2003 tras un robo, fue una de las personas consultadas, explicó que su situación económica es compleja y muchas de sus necesidades siguen sin ser atendidas, entre estas la entrega de medicamentos para su hija que padece diabetes y la oportunidad de empleo para él o sus familiares.
