En los últimos meses, médicos han señalado a la Junta Directiva (JD) de la Liga Nacional contra el Cáncer (que administra los recursos del Instituto de Cancerología y Hospital Dr. Bernardo del Valle, Incan), de mala gestión, de ignorar al gremio médico, de bloquear la investigación y amenazar a los doctores residentes. A pesar, de los múltiples señalamientos los integrantes de la Junta Directiva callan y no se defienden.
POR MARIELA CASTAÑÓN
mcastanon@lahora.com.gt
Los médicos denunciaron el mes pasado, que uno de los principales problemas es la mala gestión de la JD, ejemplificaron que el año pasado 1 mil 400 pacientes no terminaron su tratamiento debido a que la Liga Nacional contra el Cáncer no generó recursos económicos para la gratuidad del servicio y se sostuvo por medio de los fondos de las personas con cáncer. (Lea el recuadro Ministerio de Salud otorga Q21.7 millones anuales al Incan).
El pasado 12 de abril la molestia generalizada se hizo pública, cuando un total de 42 médicos especialistas en cancerología anunciaron su renuncia debido a la “mala gestión”.
El 3 de mayo, Miguel Ortega, subjefe del Departamento de Radioterapia del Incan, lamentó la forma como se administran los recursos e indicó que era necesario que se cambiara a la JD o se modificaran los estatutos de captación de donativos y recursos para ayudar al paciente.
“Esto se debe a que la administración de la Liga ha perdido su misión y visión inicial que es recaudar fondos en base a donativos u otras formas que permitan ayudar al paciente, para que la donación de fondos sirva para el sostenimiento del Hospital, de ahí que el paciente pueda ser tratado de forma gratuita o sea tratado de acuerdo con su condición económica. La Liga perdió su función y se ha dedicado a administrar –los recursos económicos– como si fuera una empresa privada, le traslada el cobro al paciente”, refirió Ortega en aquella ocasión.
Por otro lado, a partir del 1 de junio, los médicos Eduardo Gharzouzi y Joaquín Barnoya, quienes laboraban en el Programa de Maestrías de Cirugía Oncológica, Ginecología Oncológica y Radioterapia en el Incan, renunciaron por tres motivos: mala gestión de la JD de la Liga Nacional contra el Cáncer; por desconocimiento al Consejo de Médicos y su representación y por el bloqueo en el desarrollo de investigación y educación en el Incan.
Otro de los señalamientos a la JD es la amenaza a algunos médicos residentes que en asambleas han emitido su opinión sobre el actuar de algunos integrantes de la JD.
La Hora buscó a representantes de la JD por medio de la Jefatura de Relaciones Públicas de la Liga. Este vespertino fue remitido con el doctor Javier Figueroa, quien funge como vicepresidente de JD de La Liga (Lea el recuadro ¿Quiénes integran la JD de la Liga Nacional contra el Cáncer?).
Figueroa pidió que se le enviaran las preguntas del tema a abordar; se le compartió los puntos centrales de la entrevista, después de leer la información por un mensaje de WhatsApp, respondió: “En vista que son varios puntos por abordar, lo someteré a sesión de JD, por el momento no estoy autorizado a dar información”.
Al vicepresidente de la JD de la Liga se le explicó la necesidad de tener su postura sobre los señalamientos a la JD, se le indicó la fecha del cierre del reportaje, pero a pesar de eso no contestó. (Lea el recuadro: Temas centrales de la entrevista).
PACIENTES Y BLOQUEO DE INVESTIGACIÓN
La Hora publicó el pasado el pasado 29 de mayo, el reportaje “Pacientes con cáncer, entre precariedad, dolor y equipo descompuesto”, donde expone la situación de tres personas enfermas de cáncer, quienes explican la precariedad en la que viven y las dificultades que enfrentan para pagar sus tratamientos en el Incan.
Además, indican las dificultades de viajar desde sus departamentos a la capital; y de cómo afecta su salud y su situación económica, cuando los aparatos para sus radioterapias se descomponen.
Los médicos Eduardo Gharzouzi y Joaquín Barnoya, quienes fungían como coordinador y asesor de investigación respectivamente en el Programa de Maestrías de Cirugía Oncológica, que pertenece a la Facultad de Ciencias Médicas de la Universidad de San Carlos de Guatemala, habían propuesto fortalecer la investigación, buscar alternativas para bajar el costo de los medicamentos a los pacientes o promover la gratuidad, sin embargo, la JD no lo autorizó, indican.
Agregaron que el cáncer es una enfermedad que necesita de medicamentos, protocolos y tecnología que se adapte a la realidad del país, por eso era vital emprender investigaciones.
De acuerdo con los médicos, desde hace nueve años no se promovía la investigación en el Incan (que forma a especialistas en cáncer: cirujanos oncólogos, ginecólogos, oncólogos y radioterapeutas, especialidades que respalda la Universidad de San Carlos).
Gharzouzi (uno de los primeros médicos reconocidos en esta especialidad, por su experiencia y conocimientos, de acuerdo con Barnoya) estaba encargado de los programas a los especialistas con cáncer. Barnoya (quien se especializó en la Universidad de Harvard, en una maestría en Salud Pública y estuvo tres años en la Universidad de California en San Francisco, haciendo una investigación de enfermedades crónicas, según su hoja de vida), asesoraba tesis y promovía programas de investigación para médicos residentes.
Además, a lo interno del Incan crearon un Departamento de Investigación donde Barnoya capacitaba personal; después lograron captar proyectos con fondos internacionales, por medio de instituciones como el Instituto Nacional de Cáncer de Estados Unidos, la Universidad de Michigan y el Instituto Federal de Suiza.
Sin embargo, con la actual Junta Directiva no lograron continuar algunos de los proyectos, debido a que los señalaron de ganar dobles sueldos y de lucrar con la Liga, mencionan los médicos. Los sueldos que percibían con fondos internacionales eran de US$150 y US$200 mensuales, los cuales estaban sujetos a una auditoría por parte de la Liga y externamente por donantes, explican.
Entre los proyectos que estaban trabajando estaba el Registro Poblacional de Cáncer (como plan piloto); un estudio sobre la relación del azúcar con el cáncer, entre otros. Una de estas iniciativas no concluyó porque la JD consideró que no tenía ningún beneficio para dicha entidad, dijeron.
“–El proyecto que no concluyó- el más emblemático, fue financiado por el Instituto Nacional de Cáncer de Estados Unidos, solo financiaron cuatro proyectos en el mundo, uno de ellos fue el nuestro con el Instituto Nacional de Salud Pública de México, Costa Rica, Colombia Guatemala, no era algo pequeño. –La JD- a regañadientes firmó el primer año del convenio y el segundo año ya no”, indican los profesionales.
Otro de los planes que pretendían impulsar, era la certificación del Incan como un centro de estudios clínicos y con ello lograr gratuidad en los medicamentos de los pacientes de escasos recursos económicos, dicen los doctores.
Según los entrevistados, uno de los proyectos implementados para tratar el cáncer de mama a pacientes de escasos recursos, fue el tratamiento con hormonas.
¿QUIÉN ESTÁ A CARGO DE LA INVESTIGACIÓN AHORA?
La Hora buscó al médico Ángel Velarde, quien actualmente está a cargo de la investigación en el Incan. Se pretendía conocer información sobre su experiencia y trayectoria pues en el gremio médico trascendió que no tiene experiencia en el tema de cáncer. También se buscaba confirmar o descartar su vinculación con la industria de estudios farmacéuticos. Además, se le consultaría sobre los proyectos y programas de investigación, y en favor de los pacientes de escasos recursos.
Este vespertino se comunicó vía telefónica con Velarde, para concertar una reunión, pero el médico respondió que recién había asumido el cargo y era prematuro conceder la entrevista. Se le intentaron plantear algunas preguntas vía telefónica; respondió brevemente y después pidió no hacer públicas sus cortas respuestas. Finalmente solicitó que se enviara una carta solicitando la entrevista, así se hizo, se entregó la solicitud a la Jefatura de Relaciones Públicas del Incan; antes se le explicó al médico la fecha de cierre del reportaje, pero de todas formas no concedió la entrevista.
IGNORARON A MÉDICOS Y AMENAZAN A RESIDENTES
Otras quejas de los médicos a la JD de la Liga es que han ignorado al gremio médico, es decir los doctores ya no tienen ninguna representatividad, sus demandas no son tomadas en cuenta, ni escuchadas.
“Nunca hubo una comunicación entre los médicos y la Junta Directiva, pero se fue solucionando, pero esta última JD decidió hacernos a un lado por completo: para empezar, tenemos un Consejo Médico donde están jefes y subjefes que se reúnen periódicamente para tomar decisiones importantes que conciernen al Hospital. Se hacen las solicitudes a la JD para que tome acción de lo que se está pidiendo, pero esas cosas se fueron ignorando y no contestaban nuestras solicitudes; desconocían al gremio médico como parte del organigrama de la institución”, explica Gharzouzi.
Barnoya y Gharzouzi dijeron que en este conflicto, despidieron al director y subdirector médico, Carlos Mauricio y Yuri Hernández, respectivamente, ambos especialistas en oncología con mayor experiencia en Guatemala. Antes no sucedía eso, porque los médicos tenían mayor participación.
Aunado a esto, se suman las denuncias de médicos residentes que indican que en una ocasión una doctora fue “dejada en mal”, frente a los pacientes y estudiantes, por el vicepresidente de la Liga, Javier Figueroa, por lo cual los médicos consideraron que Figueroa debía ser declarado non grato.
Una residente que participó en una Asamblea para votar a favor de esa decisión gremial fue llamada posteriormente por la JD para advertirle que tomarían sanciones administrativas contra ella, porque había votado para pedir la renuncia del vicepresidente de la Liga, pero ella explicó que no fue así, porque únicamente había opinado para declararlo non grato.
La sanción administrativa la enviarían por medio de una carta, pero nunca llegó, “porque no hubo argumento”, explican los residentes que conocieron el caso. Este hecho ocurrió en abril del año pasado.
Ministerio de Salud otorga Q21.7 millones anuales al Incan
El Ministerio de Salud otorga anualmente Q21.7 millones anuales al Incan, para que atienda a pacientes referidos de la red hospitalaria nacional (principalmente Hospital Roosevelt y San Juan de Dios).
Pacientes con cáncer y sus familiares, así como la Procuraduría de Derechos Humanos (PDH) han denunciado que, a partir del cuarto trimestre de cada año, las personas enfermas no reciben atención médica en el Incan, debido a que los Q21.7 millones concedidos anualmente son insuficientes para atender la demanda, lo cual pone en riesgo su vida.
Temas centrales de la entrevista
La Hora solicitó una entrevista a Javier Figueroa, vicepresidente de la JD de la Liga Nacional contra el Cáncer, para conocer su postura sobre los señalamientos de los médicos. Figueroa pidió que le enviaran las preguntas, se le explicó que se le podían compartir los puntos a tratar. Después de leer la información, dijo que lo sometería a sesión de JD y que por el momento, no estaba autorizado para dar información.
Estos eran los temas que se abordarían en la entrevista:
– Pronunciamiento de la Liga Nacional contra el Cáncer por las renuncias del Dr. Joaquín Barnoya y Eduardo Gharzouzi.
– Sindicaciones que hacen a la Liga por mala administración de recursos, ignorar al gremio médico y bloquear a la investigación.
– ¿Quiénes son y cuál es la trayectoria de quiénes ocupan los lugares de Barnoya y Gharzouzi?
– ¿Por qué no dejaron que Incan fuera certificado para hacer estudios clínicos y se lograra dar gratis los medicamentos a los pacientes?
– Señalamientos de médicos residentes por amenazas y represalias de su parte.
– Alternativas para apoyar a los pacientes con cáncer de escasos recursos.
– El proceso y el perfil de quiénes escogen a la Junta Directiva de la Liga.