Grecia Aguilera

Anthony Lake, Director Ejecutivo de UNICEF, nombró como delegado para Guatemala desde el año 2012 al economista sueco Christian Skoog, quien con motivo de conmemorarse este año 2014 los 25 años de la “Convención sobre los Derechos del Niño”, realizó de manera concisa un repaso de los principales avances y desafíos que Guatemala ha tenido con el cumplimiento de los derechos de la niñez y la adolescencia. Guatemala fue uno de los primeros países en ratificar la Convención, el 10 de mayo de 1990, de modo que en materia de Educación se avanzó hacia la “transformación del proceso educativo y la creación del Programa de Profesionalización del Magisterio, el Bachillerato Pedagógico y las Escuelas Normales de Educación Física e Interculturales Bilingües”. En el campo de Seguridad y Justicia hubo progresos con la aprobación de las siguientes leyes: en el año 2003 con la Ley de Protección Integral de la Niñez y Adolescencia, considerando a estos como sujetos de derechos; en el 2010 con la Ley de Adopciones y la Ley del Sistema de Alerta Alba Keneth, permitiendo proteger de mejor forma a los infantes y jóvenes. Los desafíos se pueden resumir en cuatro áreas: supervivencia infantil, educación para la vida, protección integral e inclusión social. La Asamblea General de las Naciones Unidas creó el 11 de diciembre de 1946 el “Fondo Internacional de Emergencia de las Naciones Unidas para la Infancia” UNICEF, con el fin de auxiliar a las niñas, niños y adolescentes víctimas de la Segunda Guerra Mundial. El 6 de octubre de 1953 la Asamblea General decidió que la organización continuara funcionando de forma permanente y modificó el nombre a “Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia”. Luego en 1954 la Asamblea General recomendó a los gobiernos de los países que se instituyera el Día Universal del Niño. Así la ONU lo celebra cada 20 de noviembre, ya que en esa fecha se aprobó en 1959 la “Declaración de los Derechos del Niño” y en 1989 la “Convención sobre los Derechos del Niño”. Uno de los propósitos de dicha Convención es promover y proteger los derechos de las niñas, niños y adolescentes en materia de supervivencia, salud y educación, además de proporcionar a la infancia amparo legal contra las peores formas de explotación. Asimismo la misión de UNICEF es velar porque todos los principios y disposiciones de la “Convención sobre los Derechos del Niño” se acaten, por lo que siempre realiza llamados a los gobiernos, familias, comunidades y personas individuales, para que se respeten cada día los derechos de la niñez. En 1965 se le otorgó a UNICEF el Premio Nobel de la Paz por su loable labor en el amparo y defensa de la niñez en todo el mundo. Pienso que la infancia es un período de suma importancia en la vida de todos los seres humanos. El correcto desarrollo físico y mental de los pequeños, depende de la responsabilidad de las personas mayores que se encuentran en su entorno. Por ello es vital que ese proceso sea supervisado con obligación y compromiso tanto por los padres como familiares cercanos, maestros, los gobernantes y sociedades de los países. Para el filósofo romano Cicerón “La familia es el principio de la Ciudad y origen o semilla del Estado.” Todos los infantes tienen derecho a disfrutar de su niñez, a progresar, a conocer el valor de convivir en sociedad, a desarrollar su creatividad, sensibilidad, inteligencia y primordialmente su voluntad. Toda acción positiva en ese sentido, es sin duda el camino correcto para que se eduque e induzca el cumplimiento de los derechos que protegen a niñas, niños y jóvenes. Estos derechos son inalienables e irrenunciables, por lo que nadie “puede vulnerarlos y desconocerlos bajo ninguna circunstancia.”

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