Por SAMEER N. YACOUB,
BAGDAD
Agencia AP
El ejército iraquí respaldado por milicianos chiís lanzó una importante operación para recuperar el control de una parte de la ciudad de Ramadi conquistada por el grupo extremista Estado Islámico, dijeron hoy un funcionario y vecinos del lugar.
Los combates se centraron en el barrio de Sijariya, en la parte oriental de Ramadi, que fue tomado por los insurgentes ayer, dijo un responsable del consejo provincial de Anbar.
El funcionario dijo que hoy se registraron intentos combates en la zona con disparos de mortero en ambos bandos. Habló bajo condición de anonimato porque no estaba autorizado a informar a periodistas.
Testigos sobre el terreno, que pidieron mantener el anonimato por temor a represalias, corroboraron la versión de la fuente.
El grupo Estado Islámico intenta tomar Ramadi, la capital de la provincia de Anbar, desde hace meses. Milicianos suníes tomaron una parte en enero.
El funcionario de Anbar agregó que milicianos del Estado Islámico fusilaron el viernes a varios hombres de la tribu al-Bu Fahd, que participa en la lucha contra el grupo extremista.
Milicianos del Estado Islámico mataron últimamente a más de 200 hombres, mujeres y niños de la tribu suní Al Bu Nimr, aparentemente en represalia por tomar partido por las fuerzas de seguridad y anteriormente por las estadounidenses.
Semanas atrás, una misión asesora estadounidense visito la base aérea al-Asad en Anbar, en busca de posibles lugares donde entrenar a combatientes que enfrentan al EI, que controla un tercio de Irak y Siria. Estados Unidos planea entrenar a efectivos de las fuerzas iraquíes y tribus sunitas, tal como sucedió con el movimiento Despertar Suní que enfrentó a Al-Qaeda a partir de 2006.
Hoy, la policía dijo que dos ataques com bombas cerca de Bagdad dejaron ocho muertos y 21 heridos. Autoridades médicas confirmaron las cifras. Todas las fuentes hablaron bajo la condición de no ser identificadas.