Jesús Abalcázar López
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A pesar de la adversidad que les tocó enfrentar, en sus primeros años luchas, sueños y anhelos, por hacer realidad el auxilio póstumo del magisterio; así como también, desde su fundación en 1967, el auxilio póstumo de los maestros y maestras se ha mantenido y superado, al punto de haberse convertido en un movimiento financiero que ha atendido múltiples necesidades de los hombres y mujeres que imparten la educación en el país, tanto a los niños y niñas, en el nivel preprimario, como en el nivel primario, y aún a la juventud en la educación media o vocacional, donde se prepara a los jóvenes en las distintas carreras vocacionales, que los ponen en el trampolín que los impulsará hacia las carreras universitarios, donde se forjan los futuros profesionales del país.
Saludos, amigos lectores de Columna de Cristal, queremos agradecerles su amable atención por esta Columna Periodística. Este día queremos invitarlos a dar un recorrido por los planes, programas y proyectos de la Asociación de Auxilio Póstumo, y demás beneficios que ofrece a sus asociados. La Asociación de Auxilio Póstumo del Magisterio Nacional de Guatemala es una asociación civil, de naturaleza mutualista, no lucrativa, con patrimonio propio y ajena a la política partidista, sindical y religiosa. La junta directiva, la preside el Profesor: Fredy Arnulfo Rodríguez Trinidad, como presidente. Hoy queremos recordar, que la asociación fue fundada el 13 de junio de 1967, habiendo sido su primera sede, el edificio de la Casa del Maestro, 4ta. avenida entre 5ta. y 6ta. calles, zona 1, de la ciudad de Guatemala. Entre los fundadores, se menciona al profesor Rafael Ramírez Arroyo, quien fuera el primer Gerente de la Asociación de Auxilio Póstumo del Magisterio.
El autor, de la letra y la música, del Himno de tan benemérita Entidad, fue el maestro Julio César Ordóñez Mayorga, quien tuvo el talento de plasmar en esta obra de arte, los principales objetivos y fundamentos filosóficos de la institución. Como ejemplo reproducimos algunos versos: “ Expresión fraternal es tu lema / Hoy por ti, mañana por mí. / Tu función es un bien mutualista / tu creación una muestra de hermandad. // ¡Oh, Maestro! Que tienes el alma / impregnada de amor y bondad, / y que esparces tus buenos ejemplos / para el bien de toda la humanidad. // Coro Cuando Dios solicite tu presencia / tendrás paz espiritual / pasarás a la lista de inmortales / de tan digna Asociación.-
En el año de 1956, se empezó a gestar la Asociación de Auxilio Póstumo del Magisterio Nacional, al crearse el proyecto llamado “Seguro de Vida del Magisterio”, que se enfocaba en dar un apoyo económico a la familia del maestro fallecido. En el año de 1960, nace a la luz el primer documento, denominado Estatutos de la Asociación de Auxilio Póstumo, auspiciado por el Instituto Guatemalteco de Seguridad Social, IGSS. Pero, ya en el año de 1961, se le reconoció la personalidad jurídica, a la naciente asociación, y además, un año después, en 1961, fueron publicados los mencionados Estatutos, en el Diario Oficial “El Guatemalteco”, naciendo así a la vida jurídica y social. Sin embargo, fue hasta el año 1967, cuando el Congreso de la República emitió el Decreto Legislativo número 1,683, remitiéndolo a la Presidencia de la República del Organismo Ejecutivo para su ratificación, publicación y cumplimiento. Dicho Decreto entró en vigencia el Día Veinticinco de Junio del Año 1967, con el cual se garantizaba la protección humanitaria indispensable, para los Deudos de los Maestros Fallecidos. Los primeros beneficiados por la nueva ley, fueron los familiares y parientes de la profesora: Blanca Aida Sánchez Barrientos, quien, como maestra, dejó de existir, precisamente, el día 25 de junio de 1967. ¡Qué descanse en paz! Y desde entonces, se cuentan por cientos y miles, las familias que han recibido los beneficios derivados del Lema de la Asociación de Auxilio Póstumo del Magisterio Guatemalteco: “Hoy por ti, mañana por mí”.
