Marco Tulio Trejo Paiz

Guatemala da la idea de que camina por inercia; anda trastumbando como a punto de sufrir un estrepitoso colapso, y es que en realidad sufre una crisis en diferentes aspectos que ni los mamacallos ignoran….

La politiquería es la principal responsable de que el país esté vistiendo trapos de cucaracha, harapientos, sobre todo porque la situación económica que afecta a la de por sí empobrecida población se ha generalizado a toda la comunidad nacional.

La Organización de las Naciones Unidas (ONU), informada en cuanto a la desastrada situación que priva aquí, sobre todo por la escandalosa corrupción que se detecta en las alturas de la burocracia y en la llanura, decidió mandar una comisión que específicamente se encargare de realizar investigaciones sobre lo que ocurre.

¡Ah!, pero los altos y bajos funcionarios del gobierno. Incluido el presidente Jimmy Morales, ni tardos ni perezosos vienen urgiendo el retiro de la Comisión Internacional Contra la Corrupción y la Impunidad (CICIG), que cuenta con el apoyo de la mayoría del pueblo. Sólo una insignificante minoría apoya o calla.

Los corruptos constituyen el mayor número de los 158 diputados al Congreso de la República, y los altos funcionarios que rodean al gobernante por convenir a sus intereses inconfesables pero obvios…

Muchos de esos “onorables” (sin h) que apoyan a sus iguales podridos de la moral han acumulado en sus cuentas bancarias y en sus escondites hogareños, millonadas y más millonadas robadas al erario aprovechando las posiciones oficiales que en mala hora llegaron a ocupar. Son unos desvergonzados y cínicos que prefieren callar, no hablar al respecto.

El Organismo Legislativo es el peor de la historia que se conoce a lo largo de la vida republicana del país. Ha habido otros largos curuleros “poquiteros”, más no tan avorazados como los de estos tiempos de caza y pesca…

Juan Pueblo opina que la CICIG tiene el respaldo absoluto de los buenos guatemaltecos, y debe seguir desnudando de cuerpo entero a lo Adán y Eva a los corruptos de arriba y de abajo.

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