Lic. Douglas Abadía Cárdenas
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Continuando con el tema del Gobierno Abierto, a partir de mañana se llevará a cabo la Cumbre Mundial de Gobierno Abierto que se realizará en París, Francia (7 al 9 de diciembre de 2016).

En dicho encuentro internacional participarán aproximadamente 700 altos funcionarios del mundo, miembros de sociedad civil, observadores entre otros actores que velan por el Gobierno Abierto.

En ese sentido, Guatemala dio inicio a la construcción de su Tercer Plan de Acción Nacional de Gobierno Abierto para el período 2016-2018 bajo la coordinación del Punto de Contacto de Gobierno Abierto y la mesa técnica de Gobierno Abierto conformada por organizaciones de Sociedad Civil, entidades de Gobierno y otros actores que participaron en el proceso.

El plan de acción se constituyó a partir de la propuesta de los siguientes ejes temáticos:

Acceso a la información Pública y archivos institucionales.
Participación ciudadana.
Rendición de cuentas.
Innovación tecnológica.
Transparencia fiscal.

La importancia del Gobierno Abierto en Guatemala es evidente a partir de que más y más instituciones se han sumado de forma voluntaria y participativa como el Congreso de la República de Guatemala, la Contraloría General de Cuentas, la Procuraduría de los Derechos Humanos, el Registro Nacional de las Personas, la Universidad de San Carlos de Guatemala y otros actores vitales del Estado.

El Gobierno Abierto es participativo e inclusivo, por lo cual las puertas están abiertas para que las Organizaciones de Sociedad Civil, Sectores organizados de Sociedad Civil, personas individuales, Organizaciones del Sector Privado y del Estado participen.

El origen de la palabra “participación”, desde el punto de vista lingüístico, se trata de “tomar parte” del latín pars y capio. Participar, tomar parte, se puede hacer, respecto de cualquier hecho colectivo.

Según Cardarelli y Rosenfeld, la participación es el “conjunto de prácticas (jurídicas, económicas, políticas y culturales), que colocan a una persona como miembro competente de una sociedad y que tienen su fuente de legalidad y legitimidad en la titularidad de derechos”.

Finalmente, el asunto de la participación ciudadana no es una cuestión de moda o preferencia, sino que es una consecuencia necesaria de la evolución de la discusión sobre el Estado y la democracia.

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