ASUNCION,
Agencia AP
La fiscalía de Nueva York pidió formalmente el jueves a la justicia paraguaya la extradición de Nicolás Leoz, ex presidente de la Conmebol.
«La información no oficial que recibí dice que la cancillería recepcionó el exhorto de la embajada de Estados Unidos y la reenvió a la Corte Suprema de Justicia», dijo Ricardo Preda, abogado del ex dirigente futbolístico, a The Associated Press.
Preda agregó que desde el 1 de junio pasado, su cliente de 86 años «guarda prisión domiciliaria por orden del juez Humberto Otazú».
La fiscalía estadounidense acusó a Leoz en mayo pasado, entre otros presuntos hechos punibles, de conspiración para acordar intencionalmente, conducir o participar en actividades de crimen organizado relacionado con fraude de fondo.
Además de dirigir o intentar dirigir una transacción final que envuelve las ganancias de una actividad ilícita como fraude o recibir soborno.
Preda comentó que la corte deberá «enviar al juez Otazú el exhorto y este magistrado luego debería poner a mi disposición una copia para defender a Leoz».
«Veremos cuáles son los presuntos ilícitos y las pruebas que involucrarían a mi cliente», señaló Preda, especialista en derecho penal y lavado de activos. «Un pedido de extradición no es de ejecución inmediata. Entonces, no existe un plazo legal límite para que el juez Otazú lleve adelante el proceso».
Aunque el letrado confirmó el arribo del exhorto, la AP llamó por teléfono a la cancillería pero ningún funcionario del departamento de asuntos jurídicos internacionales estuvo disponible.
Leoz estuvo al frente de la Conmebol desde mayo de 1986 hasta abril de 2013 cuando renunció luego de que la comisión ética de FIFA lo cuestionó por haber aceptado en 1999 un obsequio de 120.000 dólares de parte de una empresa que administraba la publicidad de los mundiales organizados por FIFA.
Leoz, en entrevista con la AP, había reconocido que aceptó el dinero para gastarlo en la construcción de cuatro escuelas para indígenas, añadiendo que, además, donó 800.000 dólares más para equipar esas instituciones educativas.
Mientras esperaba el exhorto, el juez Otazú autorizó a Leoz a salir de su vivienda una vez por semana para someterse a un chequeo médico y a sesiones de masajes terapéuticos.
El ex directivo del fútbol, además, es propietario de un hospital privado especializado en enfermedades coronarias, de empresas dedicadas a la ganadería, seguros, bienes raíces e importación de medicamentos.