Dani Carvajal, segundo capitán del Real Madrid, disfruta a sus 32 años del mejor momento de su carrera con cuatro meses inolvidables, con un título en mayo (LaLiga), junio (Liga de Campeones), julio (Eurocopa) y agosto (Supercopa de Europa), de un 2024 que inició ganando la Supercopa de España y puede convertir en el más exitoso si conquista la Intercontinental para levantar seis trofeos.
No será Balón de Oro al ser un lateral, pero el año de Carvajal es difícil de superar en títulos. Su racha de éxitos se extendió en Varsovia, donde ante el Atalanta fue capitán por la suplencia del croata Luka Modric, estrenándose como segundo en el escalafón del brazalete.
Se convirtió Carvajal en el Nacional de Varsovia en el único jugador junto a Modric que conquista cinco ediciones de la Supercopa de Europa, uno de los récords que va cosechando a su larga trayectoria.
En el Real Madrid ya alcanza 26 títulos, el segundo más laureado tras Luka, con seis años menos que sus compañeros y aún temporadas por delante cuando el croata cuelgue las botas a final del curso que arranca, para poder superar el listón de coqnuistas que deje en el club blanco.
Si Carvajal inició 2024 con el buen sabor de la Supercopa de España, goleando 4-1 al eterno rival blanco, el Barcelona, sus últimos meses no los olvidará nunca al ser los más exitosos de su carrera.
El 4 de mayo se proclamaba campeón de Liga de forma matemática, con cuatro jornadas aún por disputarse, el 1 de junio conquistaba la decimoquinta Copa de Europa del Real Madrid, la sexta de su historial para dar caza a la leyenda de Paco Gento, marcando un gol en el triunfo ante el Borsussia Dortmund.
Al final de temporada con la conquista de los dos títulos más grandes a las que optaba a nivel de clubes, Carvajal le sumó su tardío estreno en una Eurocopa, se había perdido dos por culpa de las lesiones, repitiendo como goleador en su estreno ante Croacia y siendo pieza clave de la defensa del seleccionador Luis de la Fuente, para proclamarse campeón en el Olímpico de Berlín el 14 de julio.
El regreso de vacaciones de Carvajal no pudo ser más productivo y extiende una dinámica de locura. Apenas una semana de entrenamientos antes de ser titular en la final de la Supercopa de Europa y un nuevo título para poner el broche a cuatro meses con celebración por mes.
Actuando como uno de los capitanes y de los pesos pesados del vestuario, Dani dejó un gesto en el momento de levantar el trofeo. Tras hacerlo por primera vez Luka Modric le pasó la Supercopa de Europa que alzó antes de acercarse donde estaba Kylian Mbappé y darle la alternativa en el que se convertía en el primer título del delantero francés como jugador del Real Madrid, además de su primer éxito en competición europea a nivel de clubes.
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