Por SETH BORENSTEIN
WASHINGTON
Agencia (AP)
El huracán “Florence” es la segunda tormenta que más lluvias ha arrojado en Estados Unidos en 70 años, calculó un reconocido meteorólogo especializado en precipitaciones.
Sólo el huracán Harvey del año pasado soltó más lluvia en un área de 36 mil 260 metros cuadrados (14 mil millas cuadradas) durante cuatro días, dijo Ken Kunkel, meteorólogo de la Oficina Nacional de Administración Oceánica y Atmosférica y la Universidad Estatal de Carolina del Norte.
Los científicos dicen que es muy probable que el cambio climático haya elevado las precipitaciones de ambas tormentas.
El análisis preliminar de Kunkel halló que, en promedio, más de 0.4 metros (17.5 pulgadas) de lluvia cayeron en cinco estaciones meteorológicas en el área de 36 mil 260 kilómetros de las Carolinas, que abarca desde Fayetteville, Carolina del Norte, hasta Florence, Carolina del Sur. La cantidad se queda atrás de los 0.6 metros (25.6 pulgadas) de Harvey.
“Es mucha agua”, dijo Kunkel.
La tercera tormenta con más lluvia fue en marzo de 2016 en el norte de Luisiana y la séptima fue en el sur de Luisiana en agosto de 2016.
Las tres con más precipitaciones y cuatro de las principales siete han sido en los últimos tres años, algo que Kunkel dice que no es ninguna coincidencia.
Kunkel, quien se especializa en analizar datos de lluvia de miles de estaciones meteorológicas, basa su trabajo en precipitaciones desde 1949, cuando se empezó a llevar más registros a lo largo de Estados Unidos continental.
Kunkel examinó la lluvia en una zona compacta 36 mil 260 metros cuadrados y áreas más grandes como 51 mil 800, 77 mil 700 y 207 mil 200 kilómetros cuadrados (20 mil, 30 mil y 80 mil millas cuadradas). La cantidad inusual de Florence fue más evidente en la escala más pequeña.
Cuando los científicos analizaron un área más grande, 51 mil 800 millas cuadradas, Florence cayó a séptimo lugar, tras Harvey, el huracán George y dos tormentas de Luisiana de 1998, los aguaceros en el norte de California en 1962 y las lluvias torrenciales de Texas de 1994.
El análisis no ha sido publicado ni revisado por colegas, pero lo será, dijo Kunkel.
“No es sorprendente, pero sí terrorífico, que las dos principales hacedoras de lluvia sucedieron en los dos últimos años”, dijo el climatólogo Michael Mann de la Universidad Estatal de Pensilvania, quien no fue parte de la investigación de Kunkel pero la elogió. Dijo que océanos más cálidos, mayor humedad y tormentas que se mueven lento por varios factores del cambio climático, hacen que las tormentas liberen más agua.