Berlín
Agencia (dpa)
Los alemanes pasan cada vez más tiempo pegados a sus teléfonos inteligentes o navegando por Internet que teniendo contactos sociales reales con otras personas como visitar a los abuelos o reunirse con amigos, según un estudio sobre las actividades de ocio favoritas de los alemanes presentado hoy en Berlín.
Entre las actividades de ocio favoritas de los alemanes, los medios de comunicación son los claros ganadores de los últimos cinco años. Según el estudio representativo Monitor de Tiempo Libre, entre siete y nueve de cada diez actividades de ocio se caracterizan hoy en día por la televisión, escuchar la radio, hacer llamadas telefónicas o utilizar teléfonos inteligentes.
En el Monitor de Tiempo Libre, los expertos dictaminaron también que ha aumentado el estrés por las actividades de ocio en Alemania. Cuantas más opciones haya, habrá más demanda con más frecuencia, dijo Ulrich Reinhardt, director científico del estudio.
Además, hay una tendencia a informar a otros sobre las experiencias de ocio en las redes sociales a través de los selfies. Sin embargo, muchos ciudadanos alemanes no están contentos con esta inquietud, indicó el experto. Muchos desean más descanso y más tiempo para sí mismos y para los demás, comentó. Las relaciones interpersonales son como el cemento social que mantiene unido al país, enfatizó Reinhardt. «Tenemos que tener cuidado».
La televisión está en lo alto de la lista de a qué dedican más horas los alemanes en su tiempo libre. «Actualmente un 95 por ciento de todos los alemanes ven regularmente la televisión, al menos una vez por semana», escribieron en el estudio.
En el otro lado de la balanza se sitúan la música, la pintura y la poesía. Estas actividades de ocio son las más impopulares en Alemania.
La lista negra enumera lo que la mayoría de ellos nunca hace en su tiempo libre. Este negativo ránking está encabezado por la visita a la sala de juegos (89 por ciento). La música, la poesía y la pintura, así como la lectura de libros electrónicos, ocupan el segundo lugar (con un 78 por ciento). Además, menos de un tercio de los ciudadanos alemanes (29 por ciento) todavía lee regularmente. Hace cinco años era más de un tercio (35 por ciento).
Asimismo, alrededor de tres cuartas partes de los encuestados dijeron que nunca acamparon (75 por ciento) o fueron a un gimnasio (73 por ciento). Las artesanías también son impopulares: el 69 por ciento no ha dedicado nunca una hora de ocio a esto. Y el 58 por ciento nunca fue al teatro, a la ópera o a un concierto.
Sólo una buena cuarta parte de los ciudadanos alemanes (27 por ciento) juega regularmente con niños. En 2013 era casi un tercio (31 por ciento). Los abuelos y nietos también se ven con menos frecuencia. La ayuda de los vecinos está disminuyendo. La costumbre de reunirse con amigos en casa también se redujo drásticamente, del 24 a 17 por ciento.
«Hoy en día es típico que los amigos digan a través de Skype que hay que reunirse de nuevo urgentemente», dijo Reinhardt. «Sin embargo, no lo harán al final». A pesar de todo, la razón por la que se tiene menos tiempo para esto rara vez es el desinterés, sino que hay demasiados otros estímulos, agregó.
Según los cálculos de la Fundación para Cuestiones de Futuro, los alemanes tienen una media de unas cuatro horas de tiempo libre al día. Esto suma unas 2,500 horas al año. En la última encuesta de 2016, las ocupaciones más populares eran ver la televisión, escuchar la radio y realizar llamadas telefónicas.
Para el presente estudio, la Fundación para Cuestiones de Futuro preguntó a unos 2 mil alemanes de más de 14 años en julio cómo pasan su tiempo libre. La televisión ha estado en la cima de la lista de éxitos durante más de 20 años, pero la mayor parte del crecimiento proveniente de los nuevos medios de comunicación. Detrás de esta fundación está la compañía tabacalera British American Tobacco.