Copenhague
Agencia (dpa)

El pan podría formar parte del menú desde hace más tiempo de lo que se creía hasta ahora, pues unos arqueólogos encontraron en el noreste de Jordania restos carbonizados de alimentos similares al pan de 14,400 años de antigüedad, según indicaron en la revista «Proceedings».

Hasta ahora se creía que el pan entró en la dieta después de que se desarrollara la agricultura hace unos 4 mil años.

Investigadores de las universidades de Copenhague, Londres y Cambridge analizaron 24 restos carbonizados de alimentos de antiguas hogueras.

Los análisis de las muestras tomadas del yacimiento Shubayqa 1 muestran que los cazadores y recolectores del pueblo de los natufios utilizaban, entre otras cosas, espelta y plantas acuáticas de la especie «bolboschoenus maritimus» para fabricar un tipo de panecillos planos sin levadura. Pero el cultivo de cereales aún no era algo habitual, por lo que el pan sería seguramente algo excepcional, señalan.

«Es muy probable que las comidas basadas en cereales, como el pan, no se convirtieran en un alimento básico hasta que se estableció la agricultura», escriben los investigadores.

Pero posiblemente los cazadores y recolectores comenzaron a cultivar cereales porque cocinaron el primer pan con grano salvaje.

«El pan significa mucho trabajo para retirar la cáscara, moler los granos, amasar y hornear», indicó el arqueólogo londinense Dorian Fuller. «Que ya se produjera antes de que hubiera agricultura sugiere que estaba considerado como algo especial. Y el deseo de hacer más de esta comida contribuyó seguramente de forma decisiva al cultivo de cereales».

Los fragmentos analizados con microscopios electrónicos contenían trazas de granos de cereales, pero también raíces. «Tanto los componentes de cereales como los que no son de cereales parecen estar molidos, tamizados y seleccionados», escriben los investigadores. Esto se puede afirmar no solo por el tamaño de los fragmentos, sino también porque no hay ningún tipo de paja ni granos enteros.

Los restos son muy parecidos a los panes sin levadura encontrados en distintos asentamientos neolíticos y romanos de Europa y Turquía, explica la arqueobotánica de la Universidad de Copenhague Amaia Arranz Otaegui. «Ahora sabemos que los productos similares al pan ya se producían mucho antes del desarrollo de la agricultura», destacó.

Antes ya se sospechaba esto porque se habían encontrado en el yacimiento hojas de hoz y morteros de piedra.

Artículo anteriorPrimera persona nacida mediante fecundación “in vitro” cumple 40 años
Artículo siguienteFilme de Jackson sobre Primera Guerra Mundial debuta en octubre