Por LINDA A. JOHNSON
Agencia AP
Las autoridades de Estados Unidos aprobaron el primer tratamiento contra la viruela por si el virus es utilizado en un ataque terrorista.
La viruela, que es altamente contagiosa, fue erradicada del mundo en 1980 mediante una colosal campaña de vacunación.
Sin embargo, las personas nacidas después no fueron vacunadas, y pequeñas muestras fueron guardadas con fines de investigación, lo cual abre la posibilidad de que el virus sea utilizado como arma biológica.
SIGA Technologies de Nueva York ha suministrado ya dos millones de tratamientos al gobierno para su almacenamiento, que financió parte del desarrollo del medicamento, llamado TROXX.
Para probar la efectividad del medicamento, simios y conejos fueron infectados con un virus similar, les suministraron el medicamento y 90% sobrevivieron, dijo la compañía. Su inocuidad fue probada en varios cientos de voluntarios sanos, que no fueron infectados con viruela.
La viruela mató a unas 300 millones de personas en el mundo durante el siglo XX antes de ser erradicada. Los síntomas incluyen fiebre, fatiga y úlceras supurantes. Hasta ahora, los médicos sólo podían proporcionar cuidados paliativos como fluidos intravenosos y remedios para la fiebre, y aislar a los pacientes. La vacunación puede utilizarse para prevenir la infección, pero debe suministrarse cinco días después de estar expuesto al virus, mucho antes de que aparezcan los síntomas.
“Este nuevo tratamiento nos permite una opción adicional si la viruela alguna vez se usa como arma biológica”, dijo en un comunicado el doctor Scott Gottlieb, director de la Administración de Alimentos y Medicamentos de Estados Unidos.
SIGA desarrolla vacunas y medicinas para ataques biológicos, químicos, radiológicos y nucleares. El director general, Phil Gomez, dijo que la compañía desarrolla una versión intravenosa y considera vender la medicina a otros países y para tratar otras enfermedades infecciosas, como la viruela símica, que los simios africanos pueden transmitir a humanos. La viruela símica puede propagarse entre la gente y tiene una tasa de mortalidad de aproximadamente 15%.