Baikonur
Agencia (dpa)

El contacto con el primer satélite angoleño en el espacio se interrumpió horas después de su lanzamiento desde el centro espacial ruso de Baikonur, en Kazajstán, informaron hoy medios rusos.

El satélite de telecomunicaciones construido en Rusia AngoSat fue lanzado al espacio a las 19:00 GMT con un cohete impulsor Zenit.

Tras su separación del cohete, el satélite envió señales sin problemas, dijo un portavoz en Baikonur. «Pero después se perdió la conexión y no llegó ningún dato telemétrico más», explicó. El contacto se interrumpió cuando las alas con células solares fueron desplegadas.

AngoSat es un prestigioso proyecto del país del suroeste africano que fue aplazado en varias ocasiones. El satélite debía transmitir televisión y servicios de telecomunicación en Angola y en el sur de África. Los expertos confían, de todas formas, en que aún se pueda restablecer el contacto.

Para la carrera espacial rusa este es el segundo fracaso en pocas semanas. A finales de noviembre se estrelló un satélite de meteorología ruso tras despegar desde el nuevo cosmódromo de Vostochni.

Al parecer, el fallo se produjo debido a que no fue bien calculada la trayectoria de vuelo, ya que no fue ajustada a la nueva estación especial Vostochni, dijo hoy en Moscú el vicejefe de Gobierno, Dmitri Rogosin, a cargo de la investigación. «Los ajustes eran para Baikonur. No calcularon bien el acimut», afirmó a la agencia Tass. El acimut se refiere a un ángulo de la orientación sobre la superficie de una esfera real o virtual y se emplea en náutica, entre otras disciplinas.

Rogosin había sido duramente criticado por el primer ministro Dmitri Medvedev en el pasado por el satélite meteorológico. Se trató del segundo lanzamiento desde la estación espacial Vostochni, que tardó mucho tiempo en concretarse. En el primero también había habido problemas.

A mediados de diciembre, el jefe de la autoridad espacial Roskosmos, Igor Komarov, había hablado también de un error en el software para direccionar el satélite. Según dijo, el software fue diseñado hace 20 años para estaciones tan distintas como Baikonur, Plessezk o Kourou.

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