Sydney
AGENCIA/dpa

La Gran Barrera de Coral, el mayor arrecife del mundo situado frente a las costas de Australia, sólo podrá salvarse con una lucha decidida contra el cambio climático, según un estudio publicado hoy por la revista Nature.

El análisis de los científicos del equipo de Terry Hughes, de la Universidad James Cook de la localidad australiana de Townsville, subraya que medidas como la mejora de la calidad del agua y la prohibición de ciertos peces no serán suficientes para frenar la decoloración de los corales.

«El cambio climático no es una amenaza futura», dijo Hughes. «En la Gran Barrera de Coral lleva ocurriendo desde hace 18 años». No basta con medidas puntuales, porque gran parte de los arrecifes ya están muertos, subrayan los expertos.

La noticia de la enorme decoloración dio la vuelta al mundo el año pasado y este año se repite. Se cree que una de las causas es que la temperatura del agua ha aumentado en hasta cuatro grados. Los corales son animales que viven formando colonias con algas de las que las dos especies se aprovechan mutuamente. Pero con las altas temperaturas las algas se vuelven tóxicas, los corales la expulsan y pierden así sus brillantes colores, se quedan blancos.

El año pasado el 90 por ciento de la Gran Barrera de Coral se vio afectada por la decoloración. El arrecife se extiende en total a lo largo de 2 mil 300 kilómetros. Los primeros vuelos de control realizados este año por parte de las autoridades del parque marino revelaron que sigue habiendo grandes áreas afectadas. Hasta ahora siempre había habido años en los que el arrecife se recuperaba entre los períodos de blanqueamiento.

Artículo anteriorSpaceX pone satélite en órbita tras dos días de demora
Artículo siguienteIbuprofeno y diclofenaco aumentan el riesgo de paro cardíaco