Por MIKE STOBBE
NUEVA YORK
Agencia/AP
La versión en atomizador nasal de la vacuna anual contra la influenza falló nuevamente en proteger a los infantes el año pasado, la más reciente en una serie de fallas que provocó que un panel de expertos recomendara que los doctores dejaran de suministrarla a sus pacientes.
Las autoridades de salud reportaron que el atomizador tuvo malos resultados por tercer año consecutivo, mientras que la inyección tradicional contra la influenza funcionó razonablemente bien en el invierno.
«No encontramos evidencia (de que el atomizador) fuera efectivo», dijo el doctor Joseph Bresee, experto de influenza para los Centros de Control y Prevención de Enfermedades (CDC por sus siglas en inglés).
El producto, FluMist de AstraZeneca, alguna vez fue reconocido como la mejor vacuna para proteger a los niños contra la influenza. Hace apenas dos años, las autoridades aconsejaron a los doctores de que en la medida de lo posible utilizaran FluMist en los niños jóvenes, en lugar de las inyecciones.
Una comisión federal de asesoría sobre inmunización, votó para retractarse del respaldo a la vacuna, luego de que un estudio preliminar de los CDC que fue presentado al panel, demostró que no brindaba protección a la cepa de influenza que enfermó a la mayoría de las personas el año pasado.
Las recomendaciones de la comisión a menudo son adoptadas por el gobierno, que envía una guía a los doctores.
La mayoría de los estadounidenses recibe la vacuna por inyección.
FluMist es la única vacuna de atomizador nasal en el mercado. Recibió su primera licencia en 2003 y fue aprobada para personas saludables de entre 2 y 49 años de edad. A diferencia de las inyecciones fabricadas de un virus muerto, esta es realizada por medio de un virus debilitado, pero aún vivo.
El atomizador nasal representa solo cerca del 8% del total de dosis de vacunas contra la influenza que se producen anualmente. Pero debido a que se usa principalmente en niños, cerca de una tercera parte de las vacunas infantiles contra la influenza fueron de FluMist, de acuerdo a las autoridades de salud.
Estudios previos, incluyendo pruebas aleatorias coordinadas por el fabricante, mostraron que el FluMist era altamente eficaz, y que en los niños funcionaba mejor que las inyecciones tradicionales.
Las cifras lucían tan bien que, en 2014, la comisión tomó la inusual decisión de aconsejar a los médicos de que el FluMist era una mejor opción para evitar la influenza entre los niños saludables de entre 2 y 8 años de edad.
Pero desde entonces, los estudios demuestran que la vacuna no tuvo tan buenos resultados ante las cepas más comunes de la influenza durante las últimas tres temporadas. Todas las vacunas contra la influenza tuvieron malos resultados hace dos inviernos, pero los datos revelan que FluMist tuvo malos resultados en las otras dos temporadas.
