Por LINDA A. JOHNSON
TRENTON, Nueva Jersey, EE. UU.
Agencia/AP
Cuando Fido o Fluffy parecen enfermos o se comportan de manera inusual, los propietarios de mascotas se preguntan si deben llevarlos corriendo a una clínica de emergencia o esperar a ver si se reponen.
Pero hay una nueva manera de decidir si hace falta un viaje generalmente costoso a una sala de emergencia para animales, gracias a la tecnología creada para seres humanos: la telemedicina, que conecta a veterinarios con los dueños de las mascotas por medio de teléfonos y tabletas, video, correo electrónico y otros métodos.
Varias compañías lanzaron recientemente aplicaciones y cibersitios que ofrecen a los propietarios de mascotas comunicación en vivo, incluso de video, con un veterinario, bases de datos que informan sobre enfermedades de animales, comportamiento y nutrición. Además tienen veterinarios de guardia las 24 horas del día.
Hay una gran demanda para esos servicios. Casi dos tercios de todos los hogares estadounidenses tienen una o más mascotas. Y la Asociación Estadounidense de Productos para Mascotas calcula que los propietarios de animalitos caseros gastarán este año un promedio de 786 dólares de cuidados veterinarios para perros y 594 para gatos.
Los costos de los servicios de asesoramiento en línea cuestan desde unos pocos dólares para una conversación breve de texto hasta 40 dólares para una conversación en vivo que incluye el intercambio de fotos o video de la mascota enferma.
La mayoría ofrece aplicaciones para iPhone y dispositivos de Android, además de cibersitios que explican dichos servicios, ofrecen biografías de sus veterinarios y tienen listas de preguntas y respuestas de consultas anteriores. Son más fáciles de buscar y ofrecen información más confiable que navegar en el buscador de Google, dicen las compañías.
Las regulaciones de veterinaria varían de un estado a otro, pero la mayoría prohíbe diagnósticos y prescripción de tratamiento a menos de que el veterinario haya examinado físicamente al animalito antes. Por eso los servicios ofrecen información básica y asesoramiento, aunque algunos confían en que las regulaciones cambiarán para permitirles ir más allá en el futuro.