Por SETH BORENSTEIN
WASHINGTON
Agencia/AP
Algunos de más prominentes médicos internacionales y expertos en salud pública emitieron una receta urgente para un afiebrado planeta Tierra: Dejar de consumir carbón mineral tan pronto como sea posible.
Sustituir a nivel mundial el uso de carbón mineral por energía más limpia reducirá la contaminación del aire y dará a la Tierra una mejor oportunidad de evitar un peligroso cambio climático, recomendó una comisión global de salud organizada por la prestigiosa revista médica británica Lancet. El panel dijo que están en riesgo cada año cientos de miles de vidas y que el calentamiento global «amenaza con socavar el último medio siglo de avances en desarrollo y salud mundial».
Es como un fumador con problemas pulmonares: los médicos pueden tratar la enfermedad, pero lo primero que se debe hacer es que el paciente deje de fumar, o en este caso dejar de utilizar carbón mineral en los próximos cinco años, expresaron en entrevistas directivos de la comisión.
«La receta para el paciente Tierra es que tenemos una cantidad límite de tiempo para arreglar las cosas», dijo el copresidente de la comisión, el doctor Anthony Costello, pediatra y director del Instituto de Salud Global en el University College de Londres. «Tenemos un reto real, particularmente con la contaminación por carbón».
Calificó la situación como una «emergencia médica» que podría con el tiempo eclipsar la cifra de muertes por sida en la década de 1980. El doctor Costello y otros señalaron que quemar carbón mineral hace algo más que calentar la Tierra: ocasiona incluso más muertes que otros tipos de contaminación del aire que dañan la respiración y los corazones de la gente.
A diferencia de su reporte previo de 2009, que presentó los problemas de salud ocasionados por el cambio climático, este reporte se refirió más a lo que se puede hacer para mejorar la salud del planeta. Hace un llamado a reducir la contaminación del aire, a caminar más, montar más tiempo bicicleta, utilizar menos el automóvil. También recomienda mejorar el diseño urbano, poner un precio al costo de cada tonelada de carbón mineral utilizada, mejorar la planeación de servicios de salud para clima extremo y hacer una evaluación cada dos años sobre lo hecho por el planeta para estar más saludable.
«Virtualmente todo lo que uno quiera realizar para afrontar el cambio climático tiene beneficios en la salud», señaló el doctor Costello. «Estamos tratando de reducir ataques cardiacos, apoplejías y diabetes».
El reporte de la comisión Lancet apareció días después de un apasionado exhorto del papa Francisco para combatir el calentamiento global y horas después de que el gobierno del presidente Barack Obama emitió un reporte que enfatiza los costos de la falta de acción sobre el cambio climático y los beneficios de realizar algo ahora. El gobierno de Obama señaló que si no se hace algo, a comienzos del próximo siglo aproximadamente 57 mil estadounidenses morirán cada año por contaminación del aire y al menos otros 12 mil por temperaturas extremas.
«Obama no es un médico; la gente confía más en los médicos», agregó Costello.