Por BRANDON BAILEY y ANNE D’INNOCENZIO, Associated Press
SAN FRANCISCO
Agencia/AP
La industria tecnológica ha asegurado durante años que los celulares más avanzados volverían obsoletas a las billeteras, pero la mayoría de los estadounidenses sigue utilizando efectivo o tarjetas al comprar.
Eso podría cambiar a finales del año, luego que tres de las principales empresas de tecnología han prometido darles a los compradores más razones para utilizar las «billeteras digitales».
Apple informó la semana pasada que agregaría tarjetas de tiendas particulares y programas de recompensas a Apple Pay, el servicio de pagos remotos que presentó en otoño pasado. Google alista un servicio similar para millones de teléfonos que utilizan el sistema Android y Samsung promete un servicio para su nueva gama de teléfonos Galaxy que sería más aceptado en tiendas que Apple Pay y Android Pay.
«Nuestro objetivo final es remplazar la billetera», dijo la vicepresidenta de Apple, Jennifer Bailey.
Las nuevas opciones llegan en un momento en el que las cifras de pagos por celular siguen en sus primeras etapas: Cerca de 16 millones de compradores en Estados Unidos utilizaron smartphones para pagar consumos por un total de 3 mil 500 millones de dólares el año pasado, de acuerdo con la empresa investigadora eMarketer. Eso incluye pagos con Apple Pay, y otros servicios como PayPal y aplicaciones de comercios como Dunkin’Donuts y Starbucks.
Eso representa una pequeña porción de los 4.3 billones de dólares que gastaron en tiendas el año pasado, pero eMarketer anticipa que los pagos vía celular crecerán a 27 mil 500 millones de dólares en 2016.
«Estamos en las primeras etapas de la fundación para que esto suceda», dijo el analista Brian Yeager, de eMarketer. «Sin embargo, estamos logrando avances».
Los hechos ocurren luego de años de lucha de parte del sector por lanzar las billeteras digitales luego de que los principales protagonistas no pudieron llegar a acuerdos en parámetros técnicos, medidas de seguridad y términos financieros. Algunos de los principales comerciantes se rehusaron a utilizar servicios de Apple o Google, señalando que preferirían desarrollar y controlar sus propios sistemas.
Aun así, Apple abrió las puertas para un uso más generalizado de las billeteras digitales el año pasado, cuando lanzó el Apple Pay con el respaldo de los principales bancos y cadenas departamentales. Con Apple Pay, que solo funciona en los modelos más recientes de iPhones y Apple Watch, los usuarios vinculan una tarjeta de crédito o una cuenta bancaria a su celular.
Una vez que hacen eso, el usuario debe sostener el teléfono frente a un dispositivo en la caja registradora. El teléfono y el dispositivo se comunican de manera inalámbrica, para que el usuario autorice el pago al presionar el sensor de huellas dactilares del teléfono, en lugar de pasar una tarjeta de crédito. Apple Pay utiliza códigos encriptados para proteger la información financiera del comprador.
Apple asegura que consumidores y comerciantes han dado una buena recepción al Apple Pay, aunque no han dado a conocer detalles del uso del sistema.
Una de las usuarias frecuentes es Allison Lucas, una trabajadora de la industria tecnológica que pagó su caja de cereal y otros artículos en una tienda Walgreens de San Francisco con su Apple Watch.
«Uno no se da cuenta de la libertad que te da hasta que lo intentas», dijo Lucas, quien pagó su almuerzo con su reloj la semana pasada, cuando accidentalmente dejó su billetera en casa.