POR JOE MCDONALD
BEIJING
AGENCIA (AP)
El crecimiento económico de China fue de 18.3% en el primer trimestre de 2021 con respecto al mismo periodo del año pasado, gracias a la recuperación de la actividad fabril y del consumo tras la caída causada por la pandemia de coronavirus.
Las cifras anunciadas el viernes se ven magnificadas por su comparación con las del primer trimestre de 2020, cuando la economía se contrajo un 6.8%, su mayor contracción en décadas. El gobierno señaló que el crecimiento en comparación con el último trimestre de 2020, cuando la recuperación ya estaba en curso, fue de un modesto 0.6%.
La actividad empresarial ha vuelto casi a la normalidad desde que el Partido Comunista declaró la victoria sobre el coronavirus en marzo y comenzó a permitir la reapertura de fábricas y tiendas.
La segunda economía del mundo «tuvo un desempeño estable con una base consolidada y buen impulso de crecimiento», indicó la Oficina Nacional de Estadísticas en un informe.
El salto en el crecimiento económico estuvo en consonancia con las expectativas de los analistas debido a la cifra tan baja para comparar registrada en los primeros meses de 2020.
Algunos advierten que, a pesar del impresionante desempeño reciente de China, aún es incierta una recuperación porque la demanda global es débil, ya que algunos gobiernos están reimponiendo confinamientos para contener al COVID-19, los cuales provocan alteraciones en los negocios y el comercio.
La economía se contrajo 6.8% en el primer trimestre del año pasado luego de que el Partido Comunista tomó la medida sin precedentes de cerrar la mayoría de las fábricas, tiendas y oficinas para combatir el brote que comenzó en la ciudad central de Wuhan a fines de 2019. Fue el peor desempeño económico de China desde mediados de la década de 1960, cuando menos.
El crecimiento se recuperó a 6.5% con respecto al año previo en el último trimestre de 2020 después de que se reabrió la economía mientras Estados Unidos, Europa y Japón pasaban apuros con nuevos brotes de la enfermedad. China logró registrar un crecimiento de 2.3% en el año, convirtiéndose en la única de las principales economías del mundo en crecer en 2020.