Por KATHIA MARTÍNEZ
PANAMÁ
Agencia (AP)
Las utilidades o ganancias en el poderoso centro bancario internacional de Panamá alcanzaron 911 millones de dólares durante el primer semestre de 2019, una disminución de 7,0 puntos porcentuales respecto al mismo periodo del año anterior, informó el principal gremio del sector.
La merma no está relacionada al desacelerado entorno económico local ni a la reciente inclusión de Panamá en una lista gris del Grupo de Acción Financiera Internacional (GAFI) de países que no colaboran lo suficiente en el combate del lavado de dinero, dijo el presidente ejecutivo de la Asociación Bancaria de Panamá (ABP), Carlos Berguido, en conferencia de prensa.
Explicó que la baja obedeció mayormente a medidas coyunturales que tomaron los bancos en temas regulatorios para adecuarse a las normas contables a nivel global y a un incremento de gastos por transacciones de venta y compra de valores de algunos bancos.
El centro bancario panameño, uno de los más grandes de Latinoamérica y que aglutina a unos 80 bancos de América, Europa y Asia, totalizó activos por 121.028 millones de dólares, un alza de 2,6 puntos porcentuales en comparación al mismo periodo del 2018. Es uno de los sectores clave de la economía de servicios del país centroamericano.
El centro bancario panameño “es fuerte y tiene toda la capacidad para acompañar al gobierno en su compromiso de reactivar la economía”, dijo, por su parte, la presidenta de la ABP, Aimeé Sentmat de Grimaldo. “Indiscutiblemente hay un sistema que es solvente y líquido”.
Dijo, asimismo, que la banca panameña no ha sufrido de momento un impacto desfavorable a pesar de la inclusión en junio de Panamá en una lista de naciones con incumplimientos o falta de contundencia en la aplicación de las leyes contra el blanqueo de capitales y el financiamiento del terrorismo.
Panamá también enfrenta señalamientos de naciones europeas de que es un paraíso fiscal, lo cual rechazan los banqueros y las autoridades del país.
Sentmat explicó que la banca no es la culpable de la inclusión de Panamá en esa lista, aunque aseguró que el sector bancario trabajará de manera dinámica con el gobierno para salir de ella.
El gobierno del presidente Laurentino Cortizo, que heredó el problema de la anterior administración, espera que a mediados del próximo año pueda salir de la lista gris con el cumplimiento de al menos 14 compromisos adquiridos previamente, entre ellos lograr una mayor efectividad en las condenas por delitos de lavado de dinero y evasión fiscal, así como una mayor transparencia en su cuestionada actividad de sociedades anónimas.
