Por DAVID McHUGH
FRÁNCFORT
AGENCIA (AP)
Christine Lagarde, postulada para suceder a Mario Draghi como titular del Banco Central Europeo, defendió hoy las bajas tasas de interés y las medidas extraordinarias de estímulo aplicadas por el BCE tras la Gran Recesión y la crisis de deuda de la eurozona.
Lagarde, quien deja el Fondo Monetario Internacional para hacerse cargo del BCE en noviembre, dijo durante una audiencia en el Parlamento Europeo que coincide en que «se requiere una política altamente adaptable por un período prolongado».
También defendió las compras de bonos, las tasas de interés negativas y otras herramientas del banco, las que han recibido críticas sobre todo en Alemania por reducir la rentabilidad de los ahorros, entre otras cosas. Lagarde dijo que esas herramientas ayudaron a crear 11 millones de empleos desde 2013 y aminoraron las turbulencias financieras.
Sin esas medidas «la crisis hubiera sido mucho más grave», dijo Lagarde durante la audiencia en Bruselas.
Lagarde dijo que trataría de comunicarse claramente con la gente para explicar las decisiones del banco. Dijo que si bien «los operadores del mercado financiero» probablemente comprenderán el mensaje del BCE sobre asuntos monetarios, «quiero que la gente de la zona del euro comprenda por qué se toman las decisiones».
Lagarde no tiene títulos en Economía sino en Derecho, pero fue ministra de Hacienda en Francia y directora gerente del FMI. Dijo que en este organismo pidió al personal que no use siglas que siembran confusión.
Elogió la «agilidad» del banco dirigido por Draghi para crear nuevas herramientas de cara a la crisis provocada por el fuerte endeudamiento de varios gobiernos y el posterior período de baja inflación que amenazaba con desembocar en un estancamiento económico crónico.
Éstas incluyeron la tasa de interés negativa para los depósitos de los bancos, para impulsarlos a prestar el dinero en lugar de dejarlo en el BCE y la promesa de comprar los bonos de países que enfrentan altos costos para obtener préstamos.
Algunos detractores sostienen que esas medidas han conducido al bajo rendimiento de los ahorros y han reducido los incentivos de reforma de gobiernos financieramente endebles. Se considera que el anuncio de Draghi sobre la compra de bonos en 2012 desactivó la crisis de deuda hasta el punto de que jamás se puso en práctica un mecanismo de protección.
Lagarde, de 63 años, renunció al FMI cuando los líderes europeos la postularon para un período no renovable de ocho años al frente del BCE. Dejará el FMI el 12 de septiembre para asumir su nuevo puesto el 1 de noviembre.