Ciudad del Vaticano
Agencia (dpa)
Diez años después del estallido de la crisis financiera global, el mundo ha perdido la oportunidad de construir un orden económico más justo, lamentó hoy el Vaticano en un nuevo documento de carácter doctrinal.
Titulado en latín «Oeconomicae et pecuniariae quaestiones» (Consideraciones para un discernimiento ético sobre algunos aspectos del actual sistema económico y financiero), el escrito fue publicado por la Congregación para la Doctrina de la Fe con la aprobación del Papa Francisco.
Hubo una «oportunidad para desarrollar una nueva economía más atenta a los principios éticos y la nueva regulación de la actividad financiera, neutralizando los aspectos depredadores y especulativos», dice el escrito.
En lugar de ello, el mundo parece haber regresado a «un egoísmo miope» que ignora «la preocupación, no sólo de crear, sino también de difundir riqueza y eliminar las desigualdades, hoy tan pronunciadas», continúa el texto.
El documento hace un llamamiento a una regulación financiera más ajustada y describe la industria financiera como «un lugar en el que los egoísmos y los abusos de poder tienen un potencial sin igual para causar daño a la comunidad.»
El Papa siempre ha criticado abiertamente el capitalismo ilimitado, lo que ha llevado a algunos de sus adversarios de extrema derecha, especialmente en Estados Unidos, a tacharlo de «comunista».
El documento también reconoce que «ninguna actividad económica puede sostenerse por mucho tiempo si no se realiza en un clima de saludable libertad de iniciativa”.
El Vaticano añadió, sin embargo, que «también es evidente que los mercados, los poderosos propulsores de la economía, no son capaces de gobernarse a sí mismos».