SAO PAULO
AP
El ministro de Agricultura de Brasil planea viajar a Estados Unidos para tratar de revertir la prohibición que Washington impuso a la importación de carne bovina brasileña.
Blairo Maggi habló del tema el jueves en la noche en las redes sociales, horas después de que el secretario estadounidense de Agricultura, Sonny Perdue, anunció en un comunicado que Estados Unidos suspendía de inmediato todas las importaciones de carne de res de Brasil por razones de higiene.
La suspensión estará vigente en lo que Brasil adopta las medidas correctivas necesarias, se afirmó en el comunicado.
Maggi dijo que Brasil peleará por el mercado estadounidense y que encabezará la misión que visite Estados Unidos para negociar la reanudación de las exportaciones de carne de res brasileña.
Perdue anunció su decisión tres meses después del escándalo que sacudió la industria cárnica de Brasil debido a sobornos presuntamente pagados a inspectores del sector, lo cual derivó en que varios países cancelaran temporalmente sus importaciones del producto.
Perdue dijo que desde marzo los inspectores estadounidenses han rechazado el ingreso de 11% de los productos de carne bovina provenientes de Brasil, un equivalente a 860 mil kilogramos (1,9 millones de libras).
“Esa cifra es considerablemente más alta que la tasa de rechazo de 1% de los envíos provenientes del resto del mundo”, se dijo en el comunicado.
Según el comunicado, Brasil atendió las preocupaciones de los inspectores estadounidenses al prohibir las exportaciones de carne bovina a Estados Unidos desde cinco plantas, pero señaló que la medida es insuficiente.
Maggi dijo que al Departamento de Agricultura de Estados Unidos le preocupan los nódulos que salen a algunos de los animales debido a una reacción alérgica a la vacuna contra la fiebre aftosa. Señaló que los nódulos no son un peligro para la salud pública.
“Debemos resolver este asunto lo más pronto posible porque la crianza de ganado en Brasil atraviesa un momento muy difícil debido a los bajos precios del mercado”, señaló Maggi.
La Asociación Brasileña de Exportadores de Carne lamentó en un comunicado la medida estadounidense y señaló que ya están en curso “ajustes a los procesos de producción” y que se informará de ello a la misión del Ministerio de Agricultura que viajará a Estados Unidos.
En marzo, las autoridades brasileñas dijeron que investigaban a los inspectores que supuestamente recibieron sobornos para permitir que carnes caducas salieran al mercado.
Diversos países, entre ellos China, un importador importante, suspendieron de manera temporal la compra de carne brasileña. Debido a las garantías ofrecidas por las autoridades brasileñas, la mayoría reanudó las importaciones pocas semanas después.
El episodio tuvo grandes secuelas para la economía más grande de América Latina, la cual atraviesa su peor recesión en casi 30 años. Las exportaciones de carne que alcanzaban millones de dólares diarios se redujeron a menos de 100 mil dólares durante varias semanas.
Brasil fue en 2016 el productor más grande del mundo de carne bovina, y uno de los principales exportadores, según el Departamento de Agricultura de Estados Unidos. Brasil también es un importante exportador de productos de pollo y cerdo.