Buenos Aires
AGENCIA/dpa
El Gobierno argentino logró frenar, tras un acuerdo con un sector de la oposición, la aprobación de un proyecto en el Parlamento que propone cambios en el impuesto a las ganancias sobre el salario, una iniciativa fiscal clave para la gestión del presidente Mauricio Macri.
Tras una negociación con senadores y gobernadores del peronismo, el jefe de Estado se comprometió en la medianoche del martes a promover una instancia de «diálogo» con la oposición para incorporar algunas modificaciones que habían realizado al proyecto de ley en la Cámara de Diputados.
«Creemos que el diálogo es la única forma de gobernar. Nos vamos a reunir con el presidente Macri para ver cómo ideamos un mecanismo de conversación» con la oposición, dijo al canal Todo Noticias el jefe de Gabinete argentino, Marcos Peña.
El 7 de diciembre pasado la unión de diferentes bancadas de partidos opositores al Gobierno argentino, entre ellas el kirchnerismo, logró aprobar en la Cámara de Diputados un proyecto con cambios en el impuesto a las ganancias sobre el salario, una iniciativa contraria a los intereses del oficialismo. «Irresponsables», los llamó Macri un día después de la derrota parlamentaria.
La reforma busca impedir que el aumento salarial que los sindicatos argentinos negocian cada año para equiparar la alta inflación provoque que cada vez más trabajadores situados en un rango menor de jerarquía sean alcanzados por el impuesto.
Para lograr que el proyecto no se transformara en ley con la aprobación de la Cámara de Senadores, el Gobierno argentino apostó por convencer a los gobernadores provinciales, muchos de ellos también del peronismo, de que la medida provocaría un agujero fiscal en las cuentas locales, algo que finalmente logró.
«Los números del proyecto que se había aprobado en la Cámara de Diputados no cerraban, agregó Peña.
Macri llegó al poder en diciembre de 2015 con la promesa de terminar con el impuesto a las ganancias, que representa para el Estado un importante ingreso de dinero para una economía que se encuentra en recesión y con un déficit fiscal superior al 4 por ciento del Producto Bruto Interno (PBI). «En mi Gobierno los trabajadores no van a pagar impuesto a las ganancias», había dicho antes de ser elegido.
«Lo planteamos en la campaña y lo tenemos que cumplir, pero lo haremos de forma gradual cambiando las escalas (del impuesto) para que sea más justo», aseguró el jefe de Gabinete.
Creemos que el diálogo es la única forma de gobernar. Nos vamos a reunir con el presidente Macri para ver cómo ideamos un mecanismo de conversación con la oposición.
Marcos Peña, jefe de Gabinete argentino.
