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Por DANICA KIRKA
LONDRES
Agencia/AP

Los gobiernos y las industrias deben poner de su parte para fomentar el crecimiento y garantizar que la prosperidad se distribuya de manera más equitativa para contrarrestar la creciente ola de inseguridad y ansiedad, dijo anoche el gobernador del Banco de Inglaterra, Mark Carney.

En un emotivo discurso, Carney comparó los trastornos posteriores a la crisis financiera de 2008 con aquellos provocados por la Revolución Industrial, cuando Karl Marx «advertía de un espectro que inquietaba a Europa».

Durante los últimos diez años, los ingresos ajustados a la inflación en Gran Bretaña han tenido su tasa de crecimiento más lenta desde mediados del siglo XIX, subrayó.

«Nos reunimos aquí esta noche en la primera década perdida desde la de 1860», comentó Carney. «Luego de una crisis financiera global. Y en medio de una revolución tecnológica que una vez más está cambiando la naturaleza del trabajo».

Los gobiernos de todo el mundo han recurrido al manejo de sus tasas de interés y otras políticas monetarias para encarar el impacto de la crisis financiera de 2008, lo que convierte a los bancos centrales en «el único protagonista en la ciudad», dijo Carney. Pero ahora es momento de «una mezcla balanceada de políticas monetarias, fiscales y estructurales» para promover el crecimiento incluyente.

Las declaraciones posiblemente causen sorpresa en el gobierno británico, en donde algunos han criticado a Carney por lo que consideran es entrometerse más allá de sus responsabilidades. Los legisladores que estuvieron a favor de la salida de Gran Bretaña de la Unión Europea se tomaron a pecho las graves predicciones de Carney respecto a las implicaciones económicas de la salida del bloque europeo; y en junio, los votantes británicos eligieron hacerlo de todas maneras.

Carney dijo que los gobiernos deben enfrentar el hecho de que el libre comercio y los desarrollos tecnológicos han dejado rezagados a algunos, incluso si eso representa un aumento en la prosperidad global. Esto significa que las naciones desarrolladas deben redistribuir partes de las ganancias que producen estos desarrollos y retener a los trabajadores para tener éxito en la nueva economía.

Las operaciones corporativas a través de las fronteras también deben reconocer que tienen responsabilidades en sus comunidades locales, incluyendo el pago de sus impuestos, subrayó.

«La combinación de los mercados abiertos y la tecnología representa que las ganancias en un mundo globalizado amplifican las recompensas de los famosos y los afortunados», declaró. «Ahora sería el momento de los célebres y los afortunados, pero ¿qué sucede con los frustrados y los atemorizados?».

La combinación de los mercados abiertos y la tecnología representa que las ganancias en un mundo globalizado amplifican las recompensas de los famosos y los afortunados. Ahora sería el momento de los célebres y los afortunados, pero ¿qué sucede con los frustrados y los atemorizados?
Mark Carney,  gobernador del Banco de Inglaterra.

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