La tasa de inflación interanual de Estados Unidos se situó en julio en el 5,4%, en línea con la subida de los precios registrada en junio y repitiendo así el mayor alza desde agosto de 2008, según ha informado la Oficina Estadística del Departamento de Trabajo.
En términos mensuales, no obstante, la inflación dio un respiro al moderar su subida respecto de junio al 0,5% desde el 0,9% de junio, lo que supone la menor escalada mensual desde el pasado mes de febrero.
El fuerte repunte interanual de los precios en EE.UU. refleja el encarecimiento de la energía, con una subida interanual del 23,8%, mientras que los alimentos subieron un 3,8%.
Sin tener en cuenta el impacto de la volatilidad de los alimentos frescos y de la energía, la tasa de inflación subyacente se situó en el 4,3%, dos décimas por debajo de la lectura correspondiente al mes anterior, cuando el dato registró su mayor incremento anual en 29 años.
En su comparecencia ante la prensa tras la última reunión del Comité de Mercado Abierto de la Reserva Federal de Estados Unidos, el presidente de la Fed, Jerome Powell, reconoció que la inflación puede ser mayor y mas persistente de lo previsto, aunque reiteró su confianza en que se trate de un repunte transitorio.
«La inflación puede ser más fuerte y más persistente de lo proyectado», admitió Powell, para quien, sin embargo, a más largo plazo las subidas de precios se moderarán ya que las expectativas de inflación permanecen bien ancladas y parecen estar en línea con el objetivo del banco central.