La dirección de Toshiba y el Ministerio de Economía, Comercio e Industria de Japón (METI) actuaron al unísono para influir en el voto de los accionistas del conglomerado industrial reunidos en la última junta general de la compañía, celebrada en julio de 2020, en contra de las propuestas de accionistas activistas de la sociedad, según revela un informe independiente publicado por la multinacional.
El fondo singapurense Effissimo, principal accionista de Toshiba, reclamó el pasado septiembre a la compañía una investigación por parte de terceros de la junta general. Al no ser atendida su reclamación, el fondo forzó una junta extraordinaria de accionistas que el pasado mes de marzo autorizó las pesquisas.
El informe de 139 páginas producto de esta investigación independiente concluye que «Toshiba, al unísono con METI», ideó un plan para evitar que Effissimo ejerciera su derecho de propuesta en la junta general y para «influir injustamente» en el contenido del ejercicio de los derechos de voto de accionistas como 3D. «Por lo tanto, creemos que la junta general de accionistas no fue gestionada de manera justa», subraya.
La multinacional japonesa ha indicado que revisará cuidadosamente el informe de los investigadores, precisando que espera comentar más adelante el resultado de esta investigación.