La cantidad de personas que pidieron asistencia pública por desempleo en Estados Unidos disminuyó por sexta semana consecutiva, indicio de que la economía se está recuperando del golpe asestado por la pandemia del coronavirus.
Las solicitudes disminuyeron en 9.000 para situarse en 376.000, comparado con 385.000 la semana previa, informó hoy el Departamento de Trabajo estadounidense.
La cantidad de personas que se registraron para recibir las prestaciones superó los 900.000 a inicios de enero y desde entonces ha ido disminuyendo. Aun así, las solicitudes siguen siendo altas desde el punto de vista histórico: antes de la pandemia, en marzo del 2020, las solicitudes semanales eran de unas 220.000.
Cerca de 3,5 millones de personas recibían prestaciones por desempleo a nivel estatal la semana del 29 de mayo, una disminución de 258.000 comparado con 3,8 millones la semana previa.
En Estados Unidos, los negocios están reabriendo a medida que la campaña de vacunación avanza y más gente se siente cómoda regresando a restaurantes, tiendas y bares. Los empleos disponibles aumentaron a un récord de 9,3 millones en abril. Los despidos se redujeron a 1,4 millones, la cifra más baja desde el 2000.
Cuatro millones de personas renunciaron en abril, indicio de que se sienten confiadas de poder conseguir otra plaza.