Por DAVE SKRETTA
KANSAS CITY, Missouri, EE.UU.
Agencia (AP)
Mecole Hardman corrió hacia la banda para abandonar el terreno, mientras la ofensiva de los Bills ingresaba en éste.
Acto seguido, el receptor se dejó caer en la banca y se cubrió el rostro con uno de los abrigos de los Chiefs de Kansas City. Había soltado un despeje, lo que Búfalo aprovechó instantes después para un fácil touchdown.
Fue un error garrafal en los primeros minutos del partido por el campeonato de la Conferencia Americana, disputado el domingo. El coach de los Chiefs Andy Reid tenía todos los argumentos para haber relegado al joven receptor durante el resto del duelo.
Reid podría haber elegido a alguien más para que atrapara los despejes o pudo haber dispuesto que los pases se dirigieran a otros jugadores.
En cambio, el experimentado entrenador emitió un voto de confianza.
Optó por un pase de Patrick Mahomes a Hardman dos jugadas después, posteriormente terminó una jugada de 80 yardas con un pase pantalla hacia el mismo receptor, que terminó en touchdown. Cuando los Chiefs tuvieron de vuelta el balón, la primera jugada que pidió Reid fue un avance de 50 yardas que dejó la mesa puesta para otro touchdown.
Kansas City tomó la ventaja por 14-9.
Los Chiefs, campeones defensores, no volvieron a estar en desventaja. Se impusieron por 38-24 y están de regreso en el Super Bowl.
No es la primera vez que Reid mantiene en el terreno a un jugador que enfrenta predicamentos. Ya sea un quarterback que lanza una intercepción o un receptor que deja caer un pase, siempre hay probabilidades de que Reid pida jugadas específicas para tenerlos de vuelta en el partido.
Reid minimizó la conversación que sostuvo con Hardman después de su más reciente pifia —el jugador tiene un preocupante historial de errores en los regresos de patada.
«Escucha, concéntrate, sigue la jugada hasta la marca. Los fundamentos básicos», recordó Reid.
Los Chiefs podrían necesitar que haga otro par de buenas jugadas ante los Buccaneers de Tampa Bay. No han contado con Sammy Watkins desde la semana 16 debido a una lesión en la pantorrilla y fue una sorpresa que el veterano receptor quedara fuera el domingo, con lo que aumentó la presión sobre Hardman y su compañero Byron Pringle para hacerse cargo.
