El quarterback de los Patriots de Nueva Inglaterra, Tom Brady. FOTO LA HORA: ELISE AMENDOLA/AP.

Por ARNIE STAPLETON
Agencia AP

Tom Brady y los actuales campeones de la NFL, los Patriots de Nueva Inglaterra, no tendrán esta vez su habitual semana de descanso para reposar, relajarse y revitalizarse.

Lamar Jackson y los Ravens de Baltimore serán cabezas de serie número uno por primera vez desde la adopción en 1990 del actual formato de competición en la postemporada.

Patrick Mahomes y los Chiefs de Kansas City serán cabeza de serie número dos, un regalo de fin de año de los Patriots, que verán acción en la ronda de comodines por primera vez en una década debido a su sorpresiva derrota en casa por 27-24 ante Miami el fin de semana.

«Hubo demasiados errores graves», lamentó Brady.

Los Patriots han exhibido deficiencias a pesar de la solidez de su defensiva, aunque han sido inconsistentes a la ofensiva. Brady, un quarterback vetusto, ha tenido promedio de apenas 197 yardas y una tasa de pases completos de 59% en sus últimos cuatro partidos, y registró su tasa de pases más baja desde 2006.

Los Patriots, con Brady como mariscal de campo, nunca han alcanzado el Super Bowl cuando han disputado la ronda de los comodines.

«Todos los años conversamos de esto, cada equipo tiene su travesía y ésta es la nuestra», declaró el safety de los Patriots, Devin McCourty.

Una de las sorpresas en la campaña 2019 fue la inconsistencia de los Patriots a la ofensiva, en la que Brady dependió bastante del veterano Julian Edelman, mientras intentaba hacer su trabajo con un grupo de jóvenes receptores.

Sin embargo, Nueva Inglaterra tiene posibilidades de catapultarse a su cuarto Super Bowl Consecutivo gracias a una defensiva que sólo ha permitido 14,1 puntos por partido, la cifra más baja en la liga.

El cornerback Stephon Gilmore encabeza una defensiva que ha quitado 38 ocasiones la posesión al equipo contrario y convertido en una fortaleza a Nueva Inglaterra.

Los Patriots reciben el sábado a los Titans de Tennessee y los Bills de Bufalo visitan a los Texans de Houston para dar inicio al fin de semana de los comodines de la NFL.

Desde su derrota anterior, que se remonta a finales de septiembre, los Ravens han sido prácticamente imparables a la ofensiva y muy incisivos a la defensiva. Esta combinación le ha redituado 12 victorias al hilo, en las nadie ha logrado frenar a Jackson ni al equipo más anotador de la liga.

Jackson no sólo ha impuesto marca esta campaña en la NFL de yardas corridas por un quarterback, sino que además ha lanzado 36 pases para anotación. Baltimore tiene foja de 19-3 con Jackson como titular en la campaña regular, incluida una de 13-2 esta temporada.

Los Chiefs de Kansas City han tenido como mayor fortaleza en las últimas dos campañas a su ofensiva, encabezada por el actual Jugador Más Valioso de la Liga, Mahomes, y un grupo de alto poder que incluye a TE Travis Kelce, WRs Tyreek Hill y Sammy Watkins, y el running back Damien Williams.

Sin embargo, su emergente defensiva podría ser incluso más crucial para el triunfo en la postemporada. Sus defensivos habían impedido anotar en forma consecutiva a sus rivales antes de derrotar a los Chargers en el último partido de Kansas City en la campaña regular.

La mayor debilidad de los Chiefs es su línea secundaria, donde la pérdida del safety Juan Thornhill en el partido contra los Chargers les deja un gran hueco en la defensiva. Debido a su lesión en un ligamento cruzado anterior, Thornill no verá más acción en la campaña.

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