ZÚRICH
Agencia AP
La FIFA ordenó ayer que el Cardiff pague seis millones de euros (6.5 millones de dólares) al Nantes, como un primer desembolso acordado por la transferencia de Emiliano Sala, el delantero argentino que falleció en un accidente aeronáutico antes de jugar con el club galés.
Sala pereció cuando el avión monomotor que lo transportaba junto al piloto David Ibbotson de Nantes a Cardiff para completar la transacción se estrelló cerca de la isla de Guernsey, en el Canal de la Mancha, el 21 de enero.
Nantes presentó una querella ante la FIFA, cuando Cardiff se negó al pago de 15 millones de libras (unos 20 millones de dólares) que los clubes habían acordado para el traspaso el 19 de enero. Cardiff, que en el momento del deceso jugaba en la Liga Premier inglesa pero ahora ha descendido a la segunda división, ha argumentado que el argentino no era oficialmente su jugador cuando murió.
La FIFA indicó que su panel sobre el estatus de los jugadores “jamás perdió de vista la circunstancias únicas y específicas de esta trágica situación” en la disputa entre los dos clubes.
El dictamen de la FIFA se centró en el primer pago de la cuota de transferencia, y sugirió que el Cardiff podría ser también responsable por desembolsos posteriores.
“Buscaremos más aclaraciones de la FIFA sobre el significado exacto de su pronunciamiento, a fin de tomar una decisión informada sobre nuestros pasos siguientes”, informó el club galés en respuesta al fallo.
Cardiff puede apelar el veredicto ante el Tribunal de Arbitraje del Deporte (TAS).
