LANDOVER, Maryland, EE.UU.
AP
Dak Prescott castigó a la defensiva de los Redskins de Washington con su brazo y sus piernas, en la victoria por 31-21 que consiguieron ayer los Cowboys de Dallas, quienes colocaron su récord en 2-0.
Prescott completó 26 de 30 envíos para 269 yardas y tres touchdowns. Acumuló otras 69 yardas por tierra.
Una semana después de terminar con un rating perfecto de 158,3 puntos, Prescott se recuperó de una intercepción para comandar a Dallas a series consecutivas de touchdown de 97, 83 y 75 yardas. Es el primer quarterback de los Cowboys en acumular siete envíos de anotación en sus primeros dos partidos de la campaña desde Don Meredith en 1966.
Cerca de concretar una extensión de contrato que se prevé le garantice más de 30 millones, Prescott encontró a tres receptores distintos para touchdowns: Devin Smith, Jason Witten y Amari Cooper. Menos de dos semanas después de poner fin a su disputa contractual al firmar un acuerdo por seis años y 90 millones, la carga de trabajo de Ezekiel Elliott se incrementó a 23 acarreos para 111 yardas y una anotación.
Fue un juego que parecía llevarse a cabo en el corazón de Texas —todo un costado de la sección inferior del estado con camisetas blancas y azules de los Cowboys, que prácticamente superaron en número a los aficionados de los Redskins. Los gritos de “Coop” inundaron el inmueble después de cada una de las recepciones de Cooper, así como los cánticos de defensa cada vez que Washington tenía el balón.
Por los Redskins (0-2), Adrian Peterson tuvo un touchdown y Case Keenum completó pases de anotación.