MADRID /AP

Esto se ha convertido en un asunto de orgullo para el Real Madrid.

Una segunda derrota consecutiva de local ante el líder Barcelona esencialmente sepultaría las opciones del Madrid al título de la Liga española. También ahondaría la herida para una exigente afición que se hastiado de ver a su equipo pasarla mal ante su clásico rival en las citas más recientes.

Otro resultado decepcionante hoy podría sumir al club en una crisis al entrar al tramo final de la temporada, y su técnico Santiago Solari probablemente acabe pagando los platos ratos.

La derrota el miércoles 3-0 ante el Barça en el Santiago Bernabéu eliminó al Madrid en las semifinales de la Copa del Rey. Perder otra vez les dejaría a 12 puntos de los azulgranas, con 12 fechas por delante.

Solari asegura que su equipo se ha recuperado de la caída en la Copa.

“Estamos otra vez de pie y con ganas de puntos”, afirmó el entrenador argentino en una rueda de prensa el viernes. “El destino ha querido que sea contra el mismo rival, otra vez el gran clásico del fútbol español y lo disputaremos con todas las ganas, con el mismo espíritu para mejorar las cosas que hicimos mal y mantener lo que hicimos bien».

El Madrid disputó un buen primer tiempo el miércoles, pero le faltó pegada para capitalizar sus ocasiones. El Barcelona respondió con tres goles en la segunda mitad para avanzar a su sexta final seguida en la Copa, sellando un 4-1 a favor en el global.

Los merengues no han podido cantar victoria en los últimos cinco partidos ante su eterno rival en todas las competiciones, incluyendo una debacle 5-1 en el Camp Nou en el primer clásico de la temporada. El Barça ha ganado en 10 de los últimos 17 partidos en la capital española, remontándose al 6-2 que consiguieron bajo el técnico Pep Guardiola en 2009.

“Tenemos que pensar solo en el clásico de Liga, debemos recortar puntos, tenemos ganas de hacerlo”, dijo Solari.

Solari sabe que otro resultado humillante podría costarle el puesto. El ex jugador del Madrid llegó en octubre como timonel interino en reemplazo de Julen Lopetegui, despedido tras la derrota en el primer clásico. Los rumores de que José Mourinho podría volver a dirigir al club han cobrado fuerza desde que el estratega portugués fue cesado por el Manchester United.

En la otra vereda, el técnico del Barcelona Ernesto Valverde se encuentra en una situación mucho más tranquila.

“No quiero hablar del cese de Solari. No me gustó cuando le pasó a Lopetegui”, dijo Valverde. “No me gusta que les pase esto a mis compañeros».

Pero recalcó el objetivo de un club que aspira a un triplete de títulos. “Hay que ganar todo lo que se ponga por delante», dijo.

El Barcelona mantiene una diferencia de siete puntos sobre el Atlético de Madrid. Su escolta inmediato visita el domingo a la Real Sociedad, que marcha a mitad de tabla.

“La Liga todavía está por decidir y lo seguirá estando sea cual sea el resultado de este partido”, afirmó Valverde. “Intentaremos ganar, queremos ir a por la victoria, porque supondría un golpe moral importante y restarle puntos a un rival directo, pero será complicado».

Artículo anteriorVan más de 9 mil 500 menores migrantes detenidos en frontera de EE. UU.
Artículo siguiente¡Unos en la pena, otros en la pepena!