Londres
DPA
El alemán Alexander Zverev frenó ayer en seco al serbio Novak Djokovic y ganó el Masters de tenis de Londres, el título más importante hasta ahora en su carrera.
Zverev, de 21 años, firmó un partido muy sólido y doblegó con parciales de 6-4 y 6-3 a quien había dominado con puño de hierro esta semana en el certamen.
Después de una hora y 20 minutos de juego, el alemán se coronó con un passing de revés que dejó sin respuestas al número uno.
Zverev, que el sábado derrotó al suizo Roger Federer en la semifinal, sumó así su cuarto título del año, tras las consagraciones en Múnich, Madrid y Washington. Además, se convirtió en el ganador más joven del torneo desde que el propio Djokovic lo ganó con la misma edad en 2008.
Cuarto del ranking, Zverev dio un paso adelante al vencer en un fin de semana a dos de los jugadores más dominantes del último tiempo. Y se convirtió en el primer alemán en ganar el título que cierra la temporada desde el triunfo de Boris Becker en 1995.
«Realmente no puedo describirlo. Es el título más importante que gané en mi carrera», afirmó Zverev, que suma tres Masters 1000 en su palmarés.
«Novak ha jugado increíble y apenas ha perdido partidos, pero estoy contento de que perdiste uno conmigo hoy», bromeó el alemán con Djokovic.
Durante la premiación, Zverev tuvo también tiempo de agradecer y bromear con Ivan Lendl, el legendario ex jugador checo-estadounidense que hoy lo entrena. «Gracias por sumarte al equipo», expresó el germano.
«Creo que está funcionando hasta el momento, espero que siga así», le dijo el flamante campeón, que evitó que Djokovic igualara con seis títulos a Federer como máximo ganador del Masters.
Todo iba en esa dirección, ya que el hoy número uno había logrado un pleno de victorias en la fase de grupos y un triunfo contundente ante el sudafricano Kevin Anderson en las semifinales.
Su dominio era tal que ni siquiera había cedido su servicio en toda la semana y solo había enfrentado algunos ocasiones de quiebre en contra, dos de ellas contra Zverev a principios de semana. El balcánico, sin embargo, se impuso entonces con claridad 6-4 y 6-1.
Hoy fue distinto. Zverev apretó tuercas y no cometió los errores que marcaron esa derrota.
En esa medida, el alemán quebró el servicio del serbio por primera vez en el certamen para ponerse 5-4. Tres aces y un error de Djokovic después, Zverev se anotó el primer set y confirmó que la final no sería un paseo triunfal del balcánico.
No sin sorpresa, volvió a quebrar el saque de su rival nada más al arranque del segundo parcial. Si bien Djokovic le devolvió la ruptura, el alemán recuperó la ventaja tomando nuevamente el saque de su rival, se puso 3-1 y a partir de ese momento encaminó la victoria.
Zverev, muy expeditivo, no dudó nunca con su servicio y se coronó al resto, con una impecable devolución de revés que redondeó una semana en la que fue de menos a más.
