Por Noelia Román
Barcelona
Agencia (dpa)
Con la plantilla ya completamente cerrada, el Barcelona buscará mañana ante el Huesca su tercera victoria consecutiva en la Liga española de fútbol antes de que ésta se pare por dos semanas para que las selecciones nacionales entren en juego.
Ante su hinchada y un recién ascendido que nunca antes había alcanzado la Primera División española, los vigentes campeones intentarán el pleno de nueve puntos, el objetivo marcado por Ernesto Valverde para este primer tramo de la competición doméstica: tres fechas, tres triunfos y una cima, de momento, compartida con el Real Madrid.
El entrenador azulgrana tendrá después más de diez días y más futbolistas de los habituales para poder seguir trabajando con un equipo que sufrió más de lo previsto para superar al también recién llegado Valladolid, eso sí, con la cancha en condiciones impropias de un torneo como la Liga.
Las dudas sobre el encaje del brasileño Philippe Coutinho en el mediocampo, la progresiva adaptación del francés Ousmane Dembélé y el estado de forma del uruguayo Luis Suárez planean sobre un choque que, difícilmente, concitará un gran interés entre la hinchada local.
El horario -media tarde en Barcelona- y el fin de las vacaciones veraniegas para muchos ciudadanos no invitan a pensar en un Camp Nou repleto de «culés». La ocasión, en cambio, se presenta magnífica para que los aficionados oscenses participen de uno de los grandes duelos de la temporada para su equipo.
Huesca dista menos de 300 kilómetros de la capital catalana y no es descartable que un buen número de hinchas se desplace hasta el coliseo azulgrana con la esperanza de que los dirigidos por el argentino Leo Franco protagonicen la sorpresa de la jornada.
El gran arranque de temporada del Huesca, con una victoria sobre el Eibar por 2-1 y un empate 2-2 ante el Athletic de Bilbao, alimenta sus sueños.
“Vamos a jugar contra un rival importante, para mí es uno de los tres partidos más difíciles del año», afirmó en la previa Leo Franco.
«Vamos con nuestras armas, con nuestra convicción y, seguramente, con esas ganas y competencia que está demostrando el equipo en estos últimos días”, continuó el técnico argentino, sin desvelar si, por tercer partido consecutivo, repetirá su once de salida.
La Liga vivirá mañana además dos interesantísimos duelos regionales para abrir y cerrar una jornada que promete grandes emociones: Levante y Valencia estrenarán el domingo futbolístico, mientras que el siempre intenso derby andaluz entre Betis y Sevilla lo clausurará.
Con toda la ciudad pendiente de lo que suceda en el Benito Villamarín, el Betis quiere aprovechar su condición de local para conquistar su primera victoria en un campeonato que inició por debajo de las expectativas: apenas un punto de seis posibles y ningún gol, pese a las fases de buen juego.
El Sevilla, por su parte, buscará la revancha respecto a los últimos derbies (5-3 para el Betis y 2-2), después de haber solventado esta misma semana la fase previa de la Liga Europa, que también disputarán sus vecinos béticos.
Para el partido de la jornada, el entrenador sevillista, Pablo Machín, no podrá contar con su capitán, el lesionado Sergio Escudero. Joaquín, el del Betis, con molestias, también está entre las dudas de Quique Setién, pendiente así mismo de William Carvalho.
Por su parte, el Valencia buscará en casa de su más modesto vecino su primer triunfo de la temporada, después de haber empatado con el Atlético de Madrid en el estreno y de haber caído en la cancha del Espanyol en la pasada fecha con una imagen poco convincente.
«Hicimos buen juego y empatamos ante el Atlético, y, luego, una derrota ante el Espanyol en 45 minutos muy mejorables. Queremos ganar este partido. Si no sería la tercera (fecha) sin hacerlo y no sería una situación cómoda. Nuestra ilusión es ganar. Pero el Valencia lleva cinco visitas sin hacerlo aquí», afirmó Marcelino García Toral, entrenador del Valencia, sin confirmar la disponibilidad para el choque del recién incorporado Gonçalo Guedes.
Los de Paco López, por su parte, afrontarán en su cancha «un reto más», tras haber debutado en el campeonato con victoria a domicilio y haber caído en la segunda fecha en casa ante el Celta de Vigo.
La tercera fecha se completará con el duelo entre Alavés y Espanyol.