MOSCÚ
AP
James Rodríguez terminó su Copa del Mundo sentado en las tribunas.
Las dolencias musculares arruinaron la Copa del Mundo de Rusia al máximo goleador del pasado Mundial de Brasil. Su baja pesó bastante a una Colombia que se fue eliminada ayer al caer en los lanzamientos de penales contra Inglaterra por los octavos de final.
El enlace del Bayern Múnich ni siquiera apareció entre los suplentes ante los ingleses debido a que no se recuperó de una lesión muscular. Vio el partido desde el asiento de una tribuna del estadio Spartak de Moscú.
Si bien al equipo dirigido por el argentino José Pekerman no le faltó garra ni reacción para revertir los momentos de adversidad en la cancha, la ausencia del conductor se sintió bastante en la generación de juego ofensivo.
“Nos faltó un jugador clave en la selección”, reconoció Pekerman después de la eliminación. “Ha sido determinante en la creación y determinación y no lo tuvimos en condiciones».
El mediopunta no logró recuperarse de las molestias musculares que lo tuvieron a maltraer durante el certamen.
James salió lesionado tras la media hora del partido final de la fase de grupos, en el que Colombia aseguró el primer puesto de su llave con una victoria 1-0 ante Senegal. Según el último parte médico, el jugador fue diagnosticado con un edema en la pantorrilla derecha.
Pese a que se había especulado con el ingreso de Luis Muriel, quien lo reemplazó en el último partido de la primera ronda, Pekerman presentó un equipo con menos perfil ofensivo en el medio, con Wilmar Barrios y Jefferson Lerma como titulares. El creativo Juan Quintero y Juan Guillermo Cuadrado fueron los responsables de abastecer balones a Radamel Falcao, único hombre en punta.
Pero en realidad, Falcao casi no se notó o pocos balones le llegaron para encarar el área durante toda la primera parte e inicios de la segunda. Incluso, se lo vio al capitán y mayor artillero de la selección retrasarse en busca de pelotas.
Una situación muy diferente cuando James logró salir como titular y jugar el partido contra Polonia en la segunda jornada de la fase de grupos. James y Quintero se juntaron para generar los tres tantos de la goleada por 3-0 contra los polacos.
Sin embargo, en el siguiente choque contra los senegaleses James debió abandonar media hora después por la lesión muscular. Colombia se las arregló para sacar el partido gracias a un gol de cabeza de su central Yerry Mina, quien fue su máximo cañonero con tres tantos en Rusia.
James ya venía de sufrir problemas en los gemelos que le afectaron en su campaña de clubes en los últimos tiempos. La carrera del colombiano se disparó después de su gran Mundial en Brasil, en que facturó seis goles y ayudó a la mejor campaña de su país en la historia.