Nizhni Nóvgorod, Rusia
DPA

La selección suiza de fútbol buscó hoy dejar atrás la polémica por los gestos políticos en celebraciones de gol que acabaron con multas de la FIFA a sus jugadores, un día antes de jugarse el pase a octavos de final del Mundial frente a Costa Rica.

«Para nosotros lo más importante es el fútbol. Eso tenemos en común, vivimos todos del fútbol, de las emociones», comentó hoy el técnico Vladimir Petkovic sobre el escándalo extrafutbolístico que dominó la preparación del partido de mañana en Nizhni Nóvgorod, en el que Suiza necesita al menos un punto para avanzar a octavos.

La polémica se originó en la victoria por 2-1 ante Serbia, cuando Xherdan Shaqiri y Granit Xhaka, ambos de origen albano-kosovar, celebraron sus goles haciendo con las manos la figura del águila bicéfala que adorna la bandera de Albania.

El gesto molestó a los serbios, que no reconocen la independencia de Kosovo, antigua provincia del país balcánico que está poblada mayoritariamente por personas de origen albanés. Serbia acudió a la FIFA y el ente multó hoy a ambos jugadores por «comportamiento antideportivo».

«El fútbol tiene que despertar emociones», añadió el entrenador Petkovic, eludiendo la pregunta de si había pedido a sus jugadores evitar esa celebración. «Lo que pasó, pasó. Lo que tenemos que hacer ahora entre todos es aprender de lo que ha pasado. Lo importante es que en el Mundial nos centremos en los partidos».

También el centrocampista Valon Behrami pidió volver a centrarse en el decisivo partido de mañana y dejar atrás días de distracción debido a la polémica.

«Obviamente es una situación que no queríamos», admitió, para añadir en tono de queja a la prensa: «Felizmente en los diarios también publicaron el resultado del partido el día después, porque por lo demás no se hablaba de fútbol».

«Lo que queremos es centrarnos en el fútbol y es lo que hemos estado hablando estos días, porque a eso hemos venido aquí: a jugar al fútbol», dijo Behrami. «La mejor forma de avanzar en este Mundial es centrarnos en el fútbol».

A Suiza le basta mañana con un empate para avanzar a octavos de final frente a una Costa Rica que llega ya eliminada y golpeada después de dos derrotas. Pero Petkovic consideró que la situación del rival no es para fiarse, sino más bien lo contrario.

«Nos hemos preparado teniendo en cuenta esa situación: es un adversario que no se quiere irse a casa con cero puntos y que está bajo mucha presión de su opinión pública», sostuvo. «Así que sin ninguna duda van a hacer todo para llevarse algún punto.

Como virtud de los «ticos», el entrenador suizo destacó que «uno de sus puntos fuertes es que es un equipo muy orgulloso». Petkovic aseguró que no especulará mañana con el resultado: «Tenemos muy claro nuestro objetivo, que es una victoria. Y vamos a intentar cumplirlo en el campo».

Artículo anteriorUn muro uruguayo para anular a Cristiano Ronaldo
Artículo siguienteBrasil busca su pase con Serbia de rival y Alemania en el horizonte