Moscú
DPA
La selección peruana de fútbol, encabezada por el delantero Paolo Guerrero y bajo la dirección del argentino Ricardo Gareca, arribó ayer a Moscú para disputar un Mundial después de 36 años de ausencia.
El cuadro peruano aterrizó en el aeropuerto de Sheremetyevo procedente de Gotemburgo, ciudad donde empató a Suecia en el último amistoso de cara al Mundial, y se dirigió después a un hotel cercano donde se concentrará antes de debutar el 16 de junio ante Dinamarca.
«Estamos muy motivados, ya estamos en Rusia que era nuestro objetivo. La sensación es muy buena, hay mucha motivación y mucha expectativa. Estamos muy tranquilos y esperamos hacer un gran partido el sábado ante Dinamarca», declaró Guerrero a la prensa peruana en el aeropuerto.
«Más que historia, el equipo tiene que hacer su fútbol, divertirse en el campo. Eso ya lo hemos demostrado. Hemos llegado físicamente muy bien, no hay lesiones», agregó la máxima estrella y el goleador histórico de los «incas».
Una multitud de aficionados recibió en medio de gritos, aplausos y cánticos a la selección, que llega al torneo mundial con una racha histórica de 15 partidos consecutivos sin perder.
Después del duelo contra los daneses en la ciudad de Saransk, el Perú enfrentará a sus otros rivales del Grupo C: a Francia el 21 de junio y a Australia el 26 del mismo mes.
