Por Ignacio Encabo
Madrid
Agencia (dpa)
Cuatro Champions seguidas, cuatro de las últimas cinco ediciones de la Liga Europa y ocho Supercopas de nueve posibles desde 2009: el poder del fútbol español a nivel continental es incontestable en la actualidad y el sábado podría estirar su dominio con una nueva Liga de Campeones del Real Madrid.
El Liverpool es el único que puede evitar que la Copa de Europa viaje por quinta temporada consecutiva a España, un país que es el dueño del continente en lo que a fútbol se refiere.
Si se cumplen los pronósticos y el Real Madrid tumba al Liverpool en el Estadio Olímpico de Kiev, los blancos se medirán en agosto en la final de la Supercopa al Atlético de Madrid, que venció recientemente al Olympique de Marsella por 3-0 en la final de la Liga Europa.
Sería la primera vez desde 1994 que dos equipos de la misma ciudad ganan las dos competiciones más importantes del fútbol europeo. En aquella temporada el Milan conquistó la Liga de Campeones y el Inter se hizo con la UEFA.
Real Madrid y Atlético han sido grandes protagonistas en Europa en los últimos años. Además de chocar en las finales de la Champions en 2014 y 2016 -ambas con triunfo del equipo blanco-, el Real Madrid sumó también el título de 2017 y el Atlético alzó la Liga Europa en 2010, 2012 y 2018.
A ello hay que añadir que el Barcelona conquistó la Copa de Europa en 2006, 2009, 2011 y 2015 y que el Sevilla se hizo con la Liga Europa en 2006, 2007, 2014, 2015 y 2016.
Hay un dato apabullante. Desde 2006 se han disputado 37 finales europeas entre Liga de Campeones, Liga Europa y Supercopa. España ha ganado 24 de ellas además de sumar nueve subcampeonatos. Por si eso fuera poco, las últimas 14 finales europeas entre un equipo de La Liga y uno extranjero cayeron del lado español.
